Max Verstappen, víctima de la guerra civil de Red Bull
La autodestrucción de la inmensa, millonaria, moderna y científica escudería Red Bull de F-1 ha empezado a poner en jaque la prestigiosa reputación de Max Verstappen, el ‘holandés volador’, que, a sus 26 años, atesora ya cuatro títulos mundiales, los cuatro últimos y estaba llamado a ser el piloto más grande de todos los tiempos.Lo que, ahora, dados los últimos resultados (cero victorias en los últimos cinco grandes premios), empieza a cuestionarse, en estos momentos de crisis y quejas públicas suyas, es si quien ganaba era Verstappen, sus manos, su arrojo, su listeza o, simplemente, era el dueño del bólido más increíble jamás diseñado.El RB20 se había convertido en la Ducati ‘Desmosedici’ de las cuatro ruedas. El dueño de ese moto, el amo de ese monoplaza, era (es) quien ganaba. Y punto. ...