La entrada de Rafael Nadal en el Foro Itálico fue menos cómodo de lo que podía suponerse en su primer partido en ese escenario en el que ha ganado 10 títulos y volvía a Roma después de 728 días. El belga Zizou Bergs, de 24 años y 108 mundial, le forzó antes de ceder la victoria por 4-6, 6-3 y 6-4 antes de darle la mano en la red tras casi tres horas.
Parecía que Nadal iba a tener un inicio tranquilo cuando a los 16 minutos ya había conseguido el primer ‘break’. Pero a partir de ese instante cambió el panorama de estar a dos bolas para el 4-1, el marcador dio un vuelco espectacular en contra. El tenista balear cometió una doble falta y tres errores para perder el saque por primera vez. Si había salido con fuerza, tranquilo y explosivo, inesperádamente todo cambió para mal hasta acabar cediendo el set en 47 minutos.
Si Bergs, bautizado de nombre Zizou en homenaje de sus padres al futbolista francés Zinedine Zidane, entró acomplejado a la central del Foro Itálico, casi llena, para enfrentarse al decacampeón balear, pronto se encontró preparado para responder y aprovechar el bajón de Nadal que, a partir del 3-1, empezó a cometer errores (14 no forzados contra 3 ganadores), nervioso y tenso, para dar la vuelta al marcador con dos ‘break’ (3-2 y 4-5) y arrebatarle el set.
Remontada
Nadal se marchó pensativo y preocupado al vestuario. “Si tienes el objetivo tira fuerte, convencido”, le pedía Carlos Moyà cuando el exnúmero 1 volvió a la pista. Un parón, para atender a une espectador en las gradas, le ayudó a calmarse, sentado ajustando un grip a su raqueta. En la reanudación ganó el primer juego en blanco, rompió el siguiente a Bergs y se colocó con 3-0 de ventaja. En las gradas su padre Sebastià tenía en brazos a su pequeño hijo Rafa, que miraba atento a la pista.
El panorama había cambiado. Nadal no dejó escapar la ventaja para ganar el segundo set. Estaba más seguro, convencido e intenso. Así hizo ‘break’ para adelantarse 2-1 y volvió a tomar una ventaja que ya no dejaría escapar pese a la lucha de Bergs, tras salvar un ‘break’ con 0-40 para certificar el 4-2, y cerrar su victoria en xxxx horas y xxxx minutos.
Hurkacz, próximo rival
Su próximo rival, Hubert Hurkacz (8 mundial) será este sábado más complicado que ante Bers y otra buena prueba de cara a Roland Garros. Nunca se ha enfrentado al tenista polaco que, sin ser especialista en tierra, tiene en su poderoso saque un arma dificil de contrarrestar.