Dentro de Andalucía existen mundos infinitos. Es una realidad que se puede comprobar simplemente visitando algunos de los rincones más exquisitos que esconde esta tierra. Playas interminables, calas escondidas, bosques de película, parajes naturales inolvidables y ciudades repletas de un impresionante patrimonio histórico gracias a las numerosas civilizaciones que han surcado estas tierras.
Hay destinos que sorprenden y que no conocen en profundidad ni siquiera los propios andaluces, como es el caso de la excursión que planteamos en esta ocasión y que se localiza en el término municipal de la localidad de Monachil. Se trata de una propuesta que no defrauda, en la que la naturaleza se expresa con toda su fuerza y que es ideal para poder disfrutarla a lo largo de todas las épocas del año.
Se trata de la denominada como ruta de ‘Los Cahorros’, que discurre a lo largo del entorno del propio río Monachil, que nace en las alturas del pico Veleta para desembocar en el Genil y que tiene como uno de sus puntos más emblemáticas una espectacular cascada, que si tenemos la suerte de contemplarla, no se nos olvidará nunca en la vida.
El municipio de Monachil se encuentra a unos 12 kilómetros aproximadamente de la capital granadina y se localiza en pleno Parque Nacional de Sierra Nevada. Es un lugar que recibe visitantes a lo largo de todo el año, donde se puede disfrutar de un tranquilo fin de semana, recorrer sus empinadas calles, disfrutar de su gastronomía y a aprovechar las decenas de posibilidades relacionadas con diferentes deportes como el senderismo que ofrece el entorno.
Sin lugar a dudas es la ruta de ‘Los Cahorros’ la que cuenta con más demanda y cada año son miles las personas que llegan hasta esta ubicación para disfrutar de sus posibilidades. Se trata de una ruta de senderismo que propone un recorrido más que interesante, con diferentes itinerarios para salvar un desnivel positivo de casi 400 metros. Una ruta encastrada en un estrecho desfiladero, en la que además de agua, curiosas formaciones rocosas y cascadas, vamos a encontrar numerosos puentes. Por esta razón, también se conoce esta ruta como «la de los puentes colgantes».
Si llegamos al pueblo directamente para hacer la ruta, sólo tendremos que seguir las indicaciones que nos llevan al parking público ‘Los Cahorros’, situado en la calle Huenes, donde podremos dejar el coche cómodamente y dirigirnos al comienzo de la ruta para comenzar el disfrute y olvidarnos por unas horas de todas nuestras preocupaciones y centrarnos en el deleite de lo que nos espera por delante. Todo lo que vamos a poder ver ha sido posible gracias a la acción que a lo largo de los años ha realizado el río Monachil en la zona, que ha configurado la roca caliza a su manera, creando formaciones realmente únicas en lo que son las últimas estribaciones de Sierra Nevada, uno de los parajes naturales más valiosos de toda España.
Recorrido revirado
La ruta discurre por este espectacular cañón, que presenta un intrincado recorrido, a través del cual iremos transitando por puentes colgantes, cuevas y numerosos estrechos. Por lo general es una ruta sencilla, indicada para todos los públicos y niveles, pero debemos de ir siempre vigilantes y con precaución.
Para llegar hasta la cascada de los Cahorros de Monachil tendremos que atravesar hasta cinco puentes colgantes, siendo el más largo de ellos de 63 metros de longitud y está suspendido a una altura de 15 metros. Un puente que, aunque ha experimentado diferentes reformas a lo largo de las décadas, se puso en servicio por primera vez hace más de 100 años.
Una ruta que realmente lo tiene todo, ya que la vamos a realizar muy cerca de uno de los pueblos más interesantes de la provincia de Granada, rodeados de agua en todo momento, al abrigo de algunos de los montes más importantes de España, entre puentes colgantes suspendidos en las alturas y que a buen seguro servirá para que disfrutemos de una aventura que tardaremos mucho tiempo en olvidar.