Además de las navidades -fiestas y mercadillos-, el mes de diciembre trae consigo el puente más largo del año, un momento perfecto para escaparse lejos de la ciudad para relajarse, recargar pilas para afrontar la recta final del año y disfrutar de la naturaleza. Una buena opción para esta época del año son, sin duda, las casas rurales, acogedores alojamientos que permiten compartir tiempo de calidad rodeado de amigos o familia. Aquí dejamos cinco apetecibles ideas.
1
Villa de Llumes, Zaragoza
Ubicada en la localidad zaragozana de Llumes se halla esta antigua escuela municipal que con el tiempo pasó a ser casa de criados para acabar convirtiéndose en el hogar de una familia numerosa. Este alojamiento rural es ideal para grupos, ya que puede acoger hasta 16 personas. Hecha de piedra natural y adobes de barro, esta vivienda dispone de dos habitaciones dobles en la planta baja, y cinco dormitorios más en la planta alta, una cocina equipada con lavavajillas, microondas, vitrocerámica y horno eléctrico que da a un comedor con una mesa para 18 comensales y barbacoa y una sala de estar con chimenea y televisión. Destaca, también, su bodega excavada a tres metros al pie de la casa forrada enteramente de piedra que cuenta con su propio asador. Por su parte, la zona exterior incluye un jardín con una fuente de piedra, mesas y sillas para descansar o tomar el aperitivo y una piscina cubierta y climatizada a disfrutar durante todo el año.
El mínimo de personas para alquilar la casa es de diez adultos y el precio es de 37 euros por persona y noche para adultos y de 20 euros para niños de entre 4 a 12 años.
2
Casa Roja, Prades (Tarragona)
Situada en Prades, una villa histórica rodeada de bosques de árboles centenarios y cielos estrellados, está la Casa Roja, una antigua vivienda de paredes de piedra y techos de madera restaurada con mimo siguiendo patrones bioclimáticos y empleando materiales sostenibles y de procedencia ecológica que cuenta con todas las comodidades para disfrutar de una estancia de ensueño. El alojamiento dispone de tres dormitorios dobles, dos baños completos, un aseo en la planta baja y una cocina totalmente equipada. En total puede acoger hasta ocho huéspedes.
Esta casa rural está cerca de la famosa zona vinícola del Priorat, por lo que se puede optar por completar la escapada con una experiencia enoturística. También se pueden visitar los monasterios de Poblet y Dantes Creus, ubicados a pocos kilómetros.
El precio va desde los 190 euros al día.
3
Nature Space Jabugo, Huelva
En plena dehesa del Parque Natural Sierra de Aracena y Picos de Aroche está el complejo rural Nature Space Jabugo, un lugar ideal para fundirse con el espectacular entorno que le rodea y reconectar cuerpo y alma. Perdidas en plena naturaleza están estas antiguas majadas, lugar donde se recogían el ganado y los pastores por la noche, fabricadas con materiales tradicionales como la piedra o el ladrillo de taco cocinado en un antiguo horno de ladrillo existente en la finca. En total hay tres casas que se pueden alquilar juntas o por separado.
Primero está Origanum, ideal para parejas o familias: puede acoger a 2 / 4 personas en sus 48 metros cuadrados. Este era el antiguo refugio del pastor de la finca y sus gallinas; de hecho, se pueden ver elementos originales como los ponederos. Dispone de un dormitorio de matrimonio, cocina, baño y salón con chimenea. Luego está Lavándula, con capacidad para dos o tres personas, y la vivienda turística de uso compartido Mentha que puede alojar hasta a nueve personas en tres habitaciones triples con baño. Este cortijo presenta una decoración cuidada con un diseño que combina toques modernos con elementos tradicionales como una mesa con máquina chacinera donada por una mujer chacinera de Jabugo, lebrillos e instrumentos de cocina antiguos. Todas ellas admiten mascotas.
Alojarse aquí es una oportunidad única para disfrutar de la naturaleza, historia, cultura y gastronomía de una de las zonas más hermosas de Andalucía. Se puede optar también por realizar diferentes actividades como senderismo, observación de aves o astroturismo.
El precio para dos personas en la Origanum es va desde los 190 euros por noche.
4
Eco Molino Rural, Abegondo (La Coruña)
Rodeado de agua, bosques y senderos, en el pueblo coruñés de Abegondo, está este antiguo molino construido a finales del siglo XIX por la familia Moar Calviño para crear un canal de derivación del río Gobia. Meticulosamente restaurado preservando su encanto y carácter original, así como sus elementos principales como el horno, las vigas de castaño, las paredes de piedra y la maquinaria completa del molino, este alojamiento rural dispone de tres dormitorios dobles decorados en un estilo rústico, un salón con sofá cama doble, una cocina totalmente equipada, dos salones-comedor con chimenea y una biblioteca. Así mismo se pueden incorporar dos camas individuales adicionales pudiendo alojar en total entre 8 y 10 personas.
La zona exterior incluye un amplio jardín de 2.000 metros cuadrados, un campo de fútbol, una canasta de baloncesto, un cenador y barbacoa. La finca está vallada por lo que se puede acudir con mascotas y dejarlas disfrutar tranquilamente del exterior.
Desde el Eco Molino Rural se puede realizar una ruta de senderismo, el paseo fluvial del río Gobia (PRG 97) cuyo primer tramo es un paseo plano de 2 kilómetros que llega hasta un molino en ruinas. La ruta completa es circular y tiene 11 kilómetros.
El precio por noche para dos personas va desde los 227 euros.
5
Casas La Ribera, Ordesa (Huesca)
En pleno corazón del Pirineo de Huesca, justo en la entrada del famoso Parque Nacional de Ordesa y Monte Perdido están las Casas La Ribera, un alojamiento turístico llevado por locales de la zona que, además, pueden asesorar a los clientes a la hora de organizar la escapada incluyendo actividades como senderismo por este bello enclave natural, visitas a granjas con niños, circuitos multiaventura, rutas en bicicletas de montaña, travesías en kayak y mucho más.
El complejo cuenta con varias casas. Especial para parejas son las suites Pradera y Buhardilla, ambas construidas en madera y piedra ofrecen un ambiente cálido y acogedor. La segunda es un apartamento-suite totalmente abuhardillado con chimenea en la habitación y cama King Size y un baño con ducha con funciones de hidromasaje. El precio de estas opciones va desde 103 euros la noche. Además, hay una casa para cuatro personas con dos habitaciones, dos baños y un porche de vigas de madera con salida directa a una pradera (desde 110 euros por noche), otra para acoger hasta seis personas (desde 130 euros por noche) y una última pensada para grupos con capacidad para 8 huéspedes (desde 200 euros por noche).
Las casas se encuentran rodeadas por una espectacular pradera de 6.000 metros cuadrados y muy cerca del río Cinca cuyo sonido ayuda a relajarse. Este espacio verde incluye iluminación nocturna, mesas, sillas, tumbonas y zona chill out, barbacoas compartidas, fuentes, área infantil con tobogán, columpios, cama elástica, un rocódromo y un castillo y para los mayores mesas de ping pong y futbolín.