El Tribunal Administrativo del Deporte (TAD) propone inhabilitar durante seis años al actual presidente de la RFEF, Pedro Rocha, según han confirmado a El Periódico de España, de Prensa Ibérica, fuentes de dicho tribunal. El TAD ya ha comunicado dicha resolución a Rocha, quien tiene 10 días para presentar alegaciones antes de que el tribunal dicte su resolución definitiva, para lo que gozará de otros 15 días de margen.
El TAD considera que Rocha cometió tres faltas muy graves mientras fue presidente de la comisión gestora de la RFEF y propone una sanción de dos años de inhabilitación por cada una de ellas. Si finalmente fuera sancionado, Rocha dejaría de ser presidente de la Federación y no podría presentar a las elecciones ordinarias, ya convocadas para el mes de septiembre.
Esta propuesta de resolución nace de una denuncia del presidente de la escuela de entrenadores Cenafe, Miguel Galán, ante el Consejo Superior de Deportes. Dicho organismo, como era preceptivo, la elevó al TAD, quien le abrió un expediente para analizar la culpabilidad de Rocha y el resto de miembros de su gestora en los hechos denunciados.
La propuesta de resolución adoptada por el TAD considera que Rocha se excedió en sus funciones y, por tanto, cometió una falta muy grave al despedir al secretario general de la RFEF, Andreu Camps; al rescindir el contrato el despacho de abogados GC Legal, dirigido por Tomás González-Cueto, imputado en el caso Supercopa; y al decidir la personación de la Federación en esta misma causa judicial en la que, paradójicamente, el propio Rocha está ìmputado, según a la resolución a la que ha tenido acceso a esta diario.
Esa misma resolución exonera de culpa en todos los casos denunciados al resto de miembros de la Comisión Gestora. El TAD no considera que ninguno de ellos se excediera en sus funciones, a diferencia de Rocha. En el caso del actual presidente federativo, el TAD no ve faltas muy graves en otros asuntos que estaba analizando, como la renovación de Luis de la Fuente, la adjudicación del VAR para las próximas temporadas o la retirada de las acciones judicial contra el acuerdo LaLiga-CVC.
En cualquier caso, Rocha podría recurrir la resolución definitiva, fuera la que fuera, por la vía judicial ordinaria, ante la Justicia de lo contencioso-administrativo. El dirigente extremeño también podría solicitar medidas cautelares para tratar de continuar al frente de la RFEF mientras se resuelve el fondo del caso.