Finalizada la ventana de selecciones, se recupera la actividad de los clubes y en el Real Madrid se afronta con cierta preocupación por las lesiones y molestias que arrastran varios jugadores del equipo tras jugar estos compromisos. Aurelien Tchouaméni y Eder Militao regresan sabiendo que no podrán actuar este fin de semana con el Real Madrid en San Sebastián, mientras que se estudiará el caso de Arda Güler, que recibió un golpe y se retiró en el primer partido de Turquía.
De no jugar, el otomano se sumará en la enfermería a Jude Bellingham (lesión en el músculo plantar de la pierna derecha), Ferland Mendy (sobrecarga pendiente de evolución), Dani Ceballos (esguince de Tobillo), Eduardo Camavinga (esguince de ligamento colateral interno en la rodilla) y David Alaba (rotura de ligamento cruzado anterior en la rodilla izquierda).
Vinicius y la final del Bernabéu
Pero más allá de esas lesiones, el Real Madrid se ha encontrado con un nuevo problema en esta ventana de selecciones que ha tenido consecuencias en la planta noble del club. Vinicius Júnior concedió una entrevista a la cadena CNN en la que insistía en su lucha contra el racismo en España. El delantero del Real Madrid mandaba el siguiente mensaje: “En España hay muchas personas, la mayoría, que no son racistas, pero hay un pequeño grupo que acaba afectando a la imagen de un país que es tan agradable para vivir. Me encanta estar aquí y me encanta jugar para el Real Madrid”. Desde el club siempre se ha respaldado al jugador en este tipo de declaraciones y se habla incluso de una “manipulación” interesada de las declaraciones de Vinicius para desgastar su imagen por parte de algunos medios.
Sin embargo, la segunda parte del mensaje del jugador no ha gustado nada en el Real Madrid, porque le ha puesto en un compromiso. “Si las cosas no evolucionan hasta 2030, creo que el Mundial necesita cambiar su ubicación porque los jugadores no se sentirán cómodos y seguros al jugar en un país donde pueden sufrir racismo. Es complicado, pero yo creo y quiero hacer todo para que las cosas puedan cambiar. Hasta el 2030 tenemos un margen muy grande para la evolución. Espero que España pueda evolucionar y entender lo serio que es insultar a una persona por el color de su piel”. El mensaje cayó como una bomba en el club ya que una de las prioridades de Florentino Pérez es convertir el Santiago Bernabéu en el segundo estadio del mundo en albergar dos finales de Mundial después de Maracaná.
Florentino, muy molesto
En el club ha molestado el momento y el contenido de estas declaraciones. En referencia a los primero, la entrevista se produjo justo antes de que se abriera la ventana de selecciones, por lo que el Real Madrid se quedó sin margen de maniobra al no haber actividad de club. Además, los blancos no podían posicionarse porque si hubieran respaldado la celebración del Mundial 2030 en España y la final en el Bernabéu se podría haber interpretado como una respuesta a las declaraciones del jugador y a su discurso en la lucha contra el racismo. Así que han estado atados de pies y manos durante estos diez días en los que la única declaración con cierto tono institucional sobre el tema la realizo Dani Carvajal, uno de los capitanes del equipo.
El lateral aprovechó su intervención en la rueda de prensa previa al encuentro contra Serbia para desmarcarse del mensaje de su compañero. “Nosotros vamos totalmente en contra de cualquier situación de racismo en los estadios. Sé lo que sufre Vini y le apoyamos tanto internamente como públicamente. Pero, más allá de esas personas, no considero que España no merezca celebrar un Mundial. No hay que poner en duda que España no es un país racista. Yo, desde pequeño, me he criado con muchísimas nacionalidades en mi barrio, en Leganés. España no es un país racista”, apuntó el capitán de la selección y vicecapitán del Real Madrid oponiéndose a las declaraciones de Vinicius. Además, otro detalle que no ha gustado en el club es que comienza a ser habitual que en cada parón de selecciones los jugadores, especialmente los brasileños (pasa también con Rodrygo), concedan entrevistas, cosa que no hacen en suelo español.
Distanciamiento por la oferta de Arabia Saudí
Esta conducta de Vinicius se suma al distanciamiento del brasileño con el club tras la oferta de Arabia Saudí. El jugador ha congelado las negociaciones para prorrogar su contrato con el Real Madrid, que dura hasta junio de 2027, después de recibir una oferta mareante de la Saudi Pro League. Una oferta que incluye una ficha astronómica y le suma el bonus de ser el embajador de fútbol del país saudí, que organizará el Mundial de 2034. Unos ingresos que rondarían los 500 millones de euros por cinco temporadas.
En la zona noble del club ha molestado mucho el comportamiento del brasileño en este asunto, lo que se ha agravado con esas declaraciones cuestionando la celebración de la final del Mundial en el Bernabéu. Palabras que han sentado muy mal en la cúpula del club, donde comienzan a no ver con malos ojos la idea un traspaso a Arabia por una cifra récord, ya que el punto de partida de la negociación serían los mil millones de su cláusula de rescisión.