El presidente del Consejo Superior de Deportes desde el pasado mes de julio, Víctor Francos, ha anunciado su dimisión del cargo este jueves. “En el día de hoy, deseo anunciar mi renuncia al cargo de Presidente del CSD, una decisión meditada que atiende a razones profesionales”, ha escrito en un comunicado. Francos, que sustituyó hace cinco meses en el puesto a José Manuel Franco, ha asegurado que se trata de “una decisión personal para iniciar un nuevo reto profesional”.
Francos abandona el cargo con multitud de carpetas de máxima importancia abiertas. La más urgente tiene que ver con la publicación de la Orden Ministerial que servirá de base para la elección de un nuevo presidente de la RFEF. Un texto cuya publicación definitiva en el BOE se está retrasando debido a los más de 1.400 folios de alegaciones recibidos por parte de las partes implicadas, un volumen por encima de lo esperado.
El Mundial, los Juegos Olímpicos…
En los próximos meses, además del proceso electoral para designar a un sucesor definitivo de Luis Rubiales al frente de la Federación de Fútbol, el CSD debe terminar de atar los detalles del Mundial 2030, que España organizará junto a Portugal y Marruecos, además de ultimar los detalles para la gran cita deportiva de 2024, los Juegos Olímpicos de París.
De hecho, esta abultada agenda era uno de los argumentos de la ministra de Educación y Deportes, Pilar Alegría, para mantener en el cargo a Francos, pese a que era un hombre de la plena confianza de Iceta. La ministra aragonesa estaba determinada a conservar su confianza en él, al menos a corto y medio plazo, pero ahora deberá buscar a otra persona que se ponga al frente del CSD.
Según detalla Francos en su comunicado, Alegría conocía su voluntad de cerrar su etapa al frente del CSD, si bien la propia ministra le refrendó al frente del deporte español tras heredar esa materia, hasta ahora bajo el mandato de Cultura (Miquel Iceta), tras la formación de un nuevo Gobierno hace menos de un mes, el pasado 20 de noviembre.
Fuentes del Gobierno reiteran a este periódico que se trata exclusivamente de una “decisión personal”, con el objetivo de iniciar “un nuevo reto profesional”. “Él entró en el CSD con un Gobierno en funciones y ha decidido aprovechar una nueva oportunidad que se le ha presentado a nivel profesional coincidiendo con el inicio de una nueva legislatura”, detallan estas mismas fuentes. Desde fuera de la política, se apunta a una fuerte propuesta económica del sector privado como detonante de su repentina y sorprendente dimisión.
El paso de Francos por el CSD
Francos accedió al cargo después de que su predecesor, Franco, fuera designado cabeza de lista del PSOE madrileño para el Senado en las pasadas elecciones generales. El político catalán había sido hasta entonces secretario general del Ministerio de Cultura y Deporte y contaba con el aval de haber desactivado la crisis con LaLiga en los trámites finales para la aprobación de la Ley del Deporte.
Considerado en diversos círculos como un hombre cercano al Real Madrid y de manera particular a su presidente, Florentino Pérez, el mayor reto de Francos en este semestre ha sido gestionar la crisis provocada por el beso de Luis Rubiales a Jenni Hermoso en la final del Mundial de Sídney.
Patinó Francos al principio, dando por hecho (al igual que Iceta) que el TAD permitirá al Gobierno suspender al ya expresidente de la RFEF, pero después, con Rubiales ya fuera, encauzó la situación, aprovechando la rebelión de las campeonas del mundo para forzar a Pedro Rocha, presidente de la gestora federativa, a aplicar cambios en la institución con sede en Las Rozas.
Presidente del CSD: un cargo inestable
La gestión de los últimos flecos de la candidatura para el Mundial 2030 ha sido otro de los puntos relevantes de su gestión al frente del organismo. Un tránsito que siempre tuvo aroma a interino, manteniendo prácticamente el mismo equipo que tenía Franco, y que se ha terminado cuando más sólido parecía, refrendado incluso por la ministra Alegría.
Falta saber quién asumirá ahora el cargo de presidente de CSD, uno de los más inestables durante la presidencia de Gobierno de Pedro Sánchez. Francos ha sido hasta ahora el cuarto presidente del CSD del dirigente socialista, tras María José Rienda, Irene Lozano y el mencionado José Manuel Francos. El sucesor de Francos, en definitiva, será el quinto máximo mandatario del deporte español en cinco años y medio.