Generación tras generación, la familia noble Sentmenant ha ocupado el histórico Castell de Vallgornera, en Perelada, Gerona. Construído en 1123 y declarado bien cultural de interés nacional, el emblemático edificio se abre ahora al público con su estreno hoy como selecto hotel boutique.
La antigua propiedad, que tras su ampliación en el siglo XVIII cobró la forma rectangular con dos torres cuadradas y gran patio central que aún conserva, se ha adaptado para albergar nueve habitaciones. Anteriormente, mientras lo usaron los Sentmenant -marqueses y con una descendiente famosa, Ágatha Ruiz de la Prada-, e iba pasando de padres a hijos, contaba con cuatro amplios salones, dos de ellos diáfanos, junto con cuatro habitaciones, dos cocinas y un apartamento anexo.
El nuevo hotel, operado por la ‘startup’ inmobiliaria catalana Badi, mantiene su esencia, e incluso muchos de los muebles de la familia propietaria, que se han restaurado y conviven con elementos contemporáneos añadidos en la cuidadosa reforma.
El proyecto ha estado a cargo del arquitecto Oriol Roselló, fundador del estudio Bangolo, quien ha abordado la restauración cuidando la estructura y realizando las mínimas intervenciones posibles para preservar su autenticidad.
“Nuestra misión era abrir la historia familiar a los huéspedes y trasladar el paso de todas las generaciones a los nuevos visitantes del Castell de Vallgornera. Para ello, era indispensable respetarlo al máximo en muchos sentidos: en su estructura y en el interior, con sistemas tradicionales de construcción y sostenibilidad que proporcionan confort”, explica Roselló.
La obra duró un año y para sus interiores contó con la dirección añadida de Marta Sánchez, de M Proyectos y anteriormente diseñadora en el Soho House de Barcelona. Como cuenta ella, “lo que más me fascinaba del castillo es que conservaba muebles de todas las generaciones que habían pasado por él: abuelos, padres e hijos desde el siglo Xll. Por ello, lo esencial en este caso era conservarlo”.
Cómo es alojarse en el Castell de Vallgornera
El nuevo hotel incorpora una piscina exterior y mantiene en todas sus estancias, incluidas sus nueve suites, un elegante estilo rústico mediterráneo, acorde con su importante pasado y con su emplazamiento.
Alojarse en una de ellas tiene un precio que va desde los 160 euros la noche hasta los 340, dependiendo de la temporada. Los huéspedes pueden disfrutar a la vez de un desayuno con productos de proximidad.
Además, tienen la posibilidad de apuntarse a diversas experiencias complementarias, desde yoga o talleres de cerámica hasta catas de vinos en el Celler de Peralada o deporte en el Golf de Peralada.
Además de estar cargado de historia y de vestigios de su época de gloria en la Edad Media, el pueblo de Peralada se sitúa en una zona privilegiada por su paisaje y su entorno, con playas, villas medievales, gastronomía y naturaleza.
También está muy cerca Figueres, la capital de la comarca del Alto Ampurdán, y donde se puede conocer más a fondo la obra y la vida del pintor Salvador Dalí.