El secretario general para el Deporte, José María Arrabal, alto cargo adscrito a la Consejería de Turismo de la Junta de Andalucía, firma en calidad de presidente del Consejo de Administración del Estadio de la Cartuja de Sevilla, la mayoría de las licitaciones de las obras que se realizaron con carácter urgente en 2021 para acoger partidos de la Eurocopa de 2020, celebrados más tarde por la pandemia de covid. Se amplió además por encima de 500.000 euros los contratos que Arrabal podía manejar por “procedimiento mínimo”, rebajándose las condiciones por la urgencia de las actuaciones. Esas obras contaron con una subvención extraordinaria de la Junta de Andalucía de 4,9 millones de euros con el objetivo de convertir al malogrado estadio sevillano en el templo de la federación española de fútbol.
Las obras que se realizaron en La Cartuja están siendo investigadas por presunto desvío de fondos a través de la empresa constructora Gruconsa, que se encargó de dos contratos de 809.543,97 euros y 87.255 euros para acondicionar ele stadio. La Guardia Civil apunta a que Luis Rubiales y su entramado pudieron embolsarse 530.000 euros en comisiones de esta constructora, donde residiría el grueso de la presunta trama de corrupción que instruye un juzgado de Madrid.
¿Quién se encargó de adjudicar esas obras bajo sospecha? ¿Qué ocurrió en el consejo de administración de La Cartuja que decidió cómo se harían esos contratos? En primer lugar, las obras se adjudicaron “por procedimiento mínimo, que no de urgencia”, informa la Consejería de Turismo. “Ese procedimiento está descrito en las normas de contratación del estadio, disponibles en su sección de perfil del contratante”, aclaran. Sin embargo, como ya avanzó el diario El Correo de Andalucía, del mismo grupo editorial, no aparecen las otras empresas que optaron a ese concurso y tampoco se conoce si en todos los casos hubo concurrencia competitiva.
El Estadio de la Cartuja es una sociedad mercantil de naturaleza pública participada en un 40% por la Junta de Andalucía y donde también se sientan el Gobierno de España (25%), el Ayuntamiento de Sevilla (19%), la Diputación (13%) y un 3% del Real Betis y el Sevilla FC. Las obras para poder acoger la Eurocopa se realizaron con carácter de urgencia, tras la renuncia de San Mamés en Bilbao como sede.
4,9 millones de subvención
En ese contexto, en mayo de 2021, la Consejería de Educación y Deportes, dirigida por Javier Imbroda, aprobó una modificación presupuestaria para reprogramar fondos y desvió 4,9 millones de euros de guarderías a las obras del estadio olímpico. Ese mismo día, el consejo de administración del estadio aprobó en un convenio ejecutar esas obras y ante la falta de tiempo, la sociedad, “dada la premura para acometer en el menor plazo de tiempo todas las actuaciones”, planteó a su consejo de administración la necesidad de establecer un convenio con la RFEF, dirigida en ese momento por Luis Rubiales, “en su condición de representante de la UEFA”, en materia de asistencia técnica, “a efectos de asesoramiento en la contratación en expedientes vinculados a la realización de las obras que requería el complejo deportivo para su puesta a punto de cara a la celebración de la competición internacional”.
¿En qué consistía ese “asesoramiento técnico”? Fuentes del Gobierno andaluz han insistido a este periódico en que ese “asesoramiento técnico” no significó que Luis Rubiales eligiera las empresas a contratar. Se adjudicaron 28 obras, “muchas a proveedores locales”, explican desde la administración. Además, aseguran que se siguieron los “criterios de transparencia y de concurrencia” que exigen los contratos de las administraciones de naturaleza pública como es el Estadio de La Cartuja. Sin embargo, fuentes del consejo de administración insisten en que ese convenio de asesoramiento técnico nunca se dio a conocer porque se alegó que “al no haber contraprestación económica, no debía hacerse público ni darse a conocer a resto de miembros del consejo”. Es decir, nadie sabe en qué términos se pactó con Rubiales ni que encargo tuvo la RFEF en esas obras.
Quiénes firmaron
El 5 de mayo de 2021 se aprobó por parte del Consejo de Administración llevar a cabo las obras con cargo al presupuesto aprobado por la subvención excepcional otorgada ese mismo día por la Consejería. Según el acta, a la que ha tenido acceso este periódico, este consejo se celebró a las 17:00 horas de forma telemática, y a él asistieron José María Arrabal (Empresa Pública para la Gestión del Turismo y del Deporte de Andalucía); Myriam del Campo Sánchez (Junta de Andalucía); David Guevara García (Ayuntamiento de Sevilla); Isabel Sánchez Fernández (Junta de Andalucía); Antonio Franco González y Magín Parrelo Garrigós (Estado); Jesús Iglesias Redondo (Secretario del estadio, no consejero), Alejandro Moyano Molina (Diputación de Sevilla, no asistió, delegando su voto en David Guevara); Alberto Javier Ortiz de Saracho Mata (Turismo y Deporte de Andalucía no asistió, delegando su voto en el Presidente del Consejo). A este Consejo acude también Daniel Oviedo (gerente del Estadio); Rafael Galán (jefe del Departamento Económico de la Junta de Andalucía) y Joaquín María Barrón Tous (letrado de la Junta de Andalucía).
En cualquier caso, el consejo de administración sí permitió que, “de una manera excepcional y por su carácter de urgencia, el presidente y el gerente de la sociedad pudieran ampliar de forma excepcional la adjudicación de obras por un importe superior a los 500.000 euros“. El único de este paquete de obras que supera ese montante es el de Gruconsa para la adecuación de la zona deportiva. El actual secretario general de Deportes, José María Arrabal, obtuvo manos libres para manejar esos contratos. En condiciones normales, esta vía exprés solo servía para contratos de hasta 30.000 euros.
En los documentos consultados, aparece la propuesta de designación de Daniel F. Oviedo Barrera -director gerente de Estadio de La Cartuja S.A.- “como responsable del seguimiento y control de las actuaciones que constituyen el objeto del contrato”.
Extrabajador de la Liga y la NBA
José María Arrabal, secretario general para el Deporte, entró en la Junta como alto cargo de la mano de Javier Imbroda. Nacido en Málaga (1975) es licenciado en Ciencias Económicas y Empresariales (Administración de Empresas) por la Universidad de Málaga. Comenzó su trayectoria profesional como entrenador de baloncesto en el Club Maristas de Málaga y, hasta su incorporación a la Consejería de Educación y Deporte, en febrero de 2019, desarrollaba su labor profesional como jefe de Desarrollo de Negocios en Oriente Medio y África del Norte para LaLiga. Ha trabajado, además, en clubes como el Real Madrid (jefe de marketing en la sección de Baloncesto y en la de Desarrollo Internacional) y el Málaga CF (director de Desarrollo y Unidad de Negocio). Durante dos años fue responsable de marketing de la NBA en España y Portugal, consta en su currículum.