Feliciano López acaba de bajar la persiana de una nueva edición del Mutua Madrid Open que dirige y ya piensa en la Fase de Grupos de la Copa Davis en Valencia y las Finales de Málaga, que han puesto a la venta las entradas esta misma semana.
Repite un año más como director de la Copa Davis. ¿Supone mayor responsabilidad?
Sí. La Davis es un evento importantísimo, y para los que hemos jugado y ahora tenemos un rol diferente es una responsabilidad, ahora en un momento de consolidación del nuevo formato.
Además, la ganó en cinco ocasiones, el que más veces en el tenis español…
Tengo cinco Ensaladeras, y cuando yo jugaba pensaba que ojalá el equipo español me llame. Tuve la suerte de participar y poder ganar cinco, compartir cosas y momentos increíbles y contribuir a la historia del tenis español más reciente.
España volverá a La Fonteta en septiembre. ¿Considera que la Copa Davis le debe una a David Ferrer, tras la eliminación en su debut como capitán en 2023?
Ojalá. Al final son cosas que tampoco dependen del capitán. Desgraciadamente, los jugadores que convocas a veces no están disponibles por lesión o lo que sea, y tienes que competir con los que están en el equipo. Ojalá este año pueda estar Carlitos (Alcaraz) y el equipo pueda clasificarse para Málaga, porque el tenis español lo merece.
El otro día Rafa Nadal apuntó que le gustaría poder despedirse este año de la Copa Davis. Eso le acerca al menos a València…
A Rafa le encanta jugar la Copa Davis, y si su cuerpo le responde y está jugando en esa época del año estoy seguro que va a intentar jugar, porque no sé cuántas Copas Davis le van a quedar y tendrá mucha ilusión. A mí como aficionado, director del torneo, como amigo, y amigo de David, tener a Rafa y a Carlos en València es un sueño, pero queda aún un poco lejos.
Este es el tercero de los cinco años que València albergará la Copa Davis. Será en La Fonteta, pero ¿el próximo año se ven en el Roig Arena…?
Estamos muy felices en València, que siempre ha apostado por el tenis. El contrato se va a cumplir, por supuesto, lo uúnico que si el Roig Arena se termina antes de que el contrato se acabe, habrá que ver si encaja todo para moverlo, y si es viable o no, pero habría que verlo. Y una vez se acabe el contrato, si València quiere seguir apostando, seguro que querrán ir al Roig Arena, con más capacidad y construido para eventos así.