Crónicas teutonas (XIX): ¡Auf Wiedersehen!
La parte más difícil de viajar es volver. Pero al tiempo la vuelta también te ofrece una oportunidad perfecta para plantearte lo que viene por delante. Viajar es una experiencia energética que te invita a reconsiderar con más claridad qué cosas son realmente indispensables y cuáles no. Cuando viajas, sobre todo si lo haces solo, tú eres tu propio hogar, tu mejor amigo (y tu peor) y tu propia familia. Todo es más efímero, pero despojarte de muchas cosas también hace que todo sea más intenso. En uno de mis libros preferidos leí: “...sin embargo sentía una gran nostalgia, de qué no podría decirlo, pero era una gran nostalgia de una vida pasada y de una vida futura, sostiene Pereira”.Esa nostalgia que te embarga al final del viaje es precisamente a la que se refiere Pereira. Una mezcla entre l...