‘La chica de Ipanema’ no se escribió en la servilleta de un bar
Antônio Carlos Brasileiro de Almeida Jobim (1927-1994), conocido mundialmente como Tom Jobim, uno de los pianistas y compositores más reverenciados de todos los tiempos, estuvo a punto de no ser músico. Su primer empleo fue vendedor de churros. Cursó el primer año de arquitectura e incluso consiguió empleo en un estudio. Y cuando empezó a estudiar música no tenía devoción por el instrumento que un día dominaría como nadie: "Odiaba el piano, me parecía cosa de chicas, lo que a mí me gustaba era el fútbol", llegó a confesar en una entrevista.El icónico periodista Ruy Castro, uno de los mayores especialistas en música brasileña, desnuda con maestría al músico Tom Jobim en su reciente libro O Ouvidor de Brasil (Companhia das Letras). A lo largo de 99 textos previamente publicados en prensa, Ca...