Olivia de Havilland, la estrella del Hollywood dorado que plantó cara (y derrotó) al todopoderoso sistema de estudios
Hace justo cuatro años se apagaba la estrella de Olivia de Havilland, considerada la última superviviente del Hollywood dorado. La actriz, que ganó dos premios Oscar y alcanzó la inmortalidad en el cine con su papel en Lo que el viento se llevó, tenía nada más y nada menos que 104 años cuando dejó de respirar mientras dormía en su residencia de París. Y a buen seguro lo hizo más que satisfecha con el impacto de su trayectoria, que fue mucho más allá de sus logros interpretativos. Porque la estadounidense sufrió las restricciones del sistema de estudios de Hollywood, que permitía a los directivos dictar por contrato en qué trabajaban las actrices y dónde vivían, y llevó a los tribunales a Warner Bros. para obtener su libertad profesional. El pleito le costó varios años de carrera, pero su v...