Las chicas malas de Alba de Céspedes
Qué paradójico lo de la damnatio memoriae en la era de la información y las tecnopromesas: el mundo entero podría caber en un dispositivo sofisticadísimo, augurio de un futuro mejor, y, aun así, algunas historias permanecen inaccesibles, algunos linajes literarios siguen pudriéndose en carpetas cerradas con candados y contratos. El larguísimo y constante proceso de desmantelamiento de la voz de las mujeres ha dado como resultado una necesidad de anclajes genealógicos que nos ayuden a resignificar nuestra identidad desde la configuración de una tradición nueva, fresca y propia: nosotras no tenemos necesidad de la ausencia, sino de la influencia.Esa genealogía se quedaría coja sin un puñado de malas mujeres, desobedientes y tranquilamente rebeldes, como Alba de Céspedes y Bertini (Roma 1911-...