No será una mujer. Y tampoco una persona con amplia experiencia en la gestión deportiva. José Manuel Rodríguez Uribes es el elegido por el Gobierno de Pedro Sánchez para asumir la presidencia del Consejo Superior de Deportes. Un nombramiento que se hará oficial en el Consejo de Ministros de este martes, como ha adelantado Iusport y han confirmado a El Periódico de España, del grupo Prensa Ibérica, fuentes del Ministerio de Educación, Formación Profesional y Deporte que dirige Pilar Alegría.
Rodríguez Uribes fue nombrado embajador español ante la UNESCO, cargo que abandonó hace unos días después de que Miquel Iceta saliera del Gobierno y Sánchez le asignara esa nueva responsabilidad. El dirigente valenciano regresa a un cargo que en cierta medida conoce, pues fue ministro de Cultura y Deporte entre enero 2020 y julio 2021, cuando fue, precisamente, sustituido por Iceta. Su nombramiento es llamativo porque regresa a ese mismo ministerio, pero lo hace con un rango inferior, de secretario de Estado. Una rareza en política.
Ministro de Cultura y Deporte entre 2020 y 2021
Sustituye a Víctor Francos, quien el pasado jueves anunció por sorpresa su renuncia al cargo, apenas un par de semanas después de ser ratificado por la nueva titular de la cartera de Deportes, la ministra Pilar Alegría. Él defendió que era por decisión propia, pero Relevo detalló que fue invitado a dimitir para no ser destituido, después de tener actitudes poco adecuadas para el cargo que ocupaba.
Rodríguez Uribes fue el máximo responsable del Deporte español durante la pandemia, pero toda la gestión en esa materia quedó concentrada en quien entonces presidía el CSD, Irene Lozano. También convivió durante un par de meses con José Manuel Franco, predecesor de Francos, antes de que Sánchez prescindiera de él durante la crisis de Gobierno que llevó a cabo en 2021.
La trayectoria de Rodríguez Uribes
Su nombramiento para aquel cargo ya resultó sorprendente, puesto que es filósofo de formación y carecía de experiencia en la gestión cultural y deportiva. En política, había ejercido los cargos de delegado del Gobierno en Madrid, durante la primera presidencia de Pedro Sánchez, y director general de Apoyo a Víctimas del Terrorismo, responsabilidad que ocupó durante cinco años (2006-2011), con José Luis Rodríguez Zapatero de presidente del Gobierno.
Como presidente del CSD, su tarea más urgente será aprobar la Orden Ministerial que debe regular los procesos electorales en las federaciones deportivas, con la de fútbol (RFEF) sobre la lupa tras el caso Rubiales. Un trámite que ya suma un par de semanas de retraso. A medio plazo, deberá liderar las negociaciones con Marruecos y Portugal para terminar de dar forma a la candidatura del Mundial 2030, así como encarar la recta final de los preparativos para los Juegos Olímpicos que se disputarán el próximo verano en París.