Rubén Baraja dirige hoy su último partido de la temporada en Mestalla y lo hace sin nada en juego. Aún así, el Pipo quiere despedir el curso en casa de la mejor manera posible ganando al Girona de Míchel: «Queremos que nos quede un buen sabor de boca».
No será una tarea fácil. «El Girona ha competido durante todo el año a gran nivel. Quizás sea el equipo de LaLiga más vertical, más rápido en su juego. Han conseguido por méritos propios meterse en la Champions. Tienen jugadores definitivos en los costados y luego un gran rematador que lleva 20 goles (Dovbyk). Esto se traduce en goles y puntos», expresó el entrenador del Valencia sobre el cuadro catalán.
Sobre el cómputo global de la temporada y el futuro más inmediato del equipo, Baraja comentó que «este año hemos mejorado en muchos aspectos pero todavía nos queda mejorar en muchos». De momento, el técnico se centra en «competir en el siguiente partido, queremos hacer las cosas bien y poder sumar». El ‘Pipo’ dio sus razones por las que el aficionado debería entrar hoy a Mestalla. «Nuestra afición ha sido fundamental y es nuestro mejor activo. Por eso me gustaría mantener ese apoyo, esa comunión de todo el año en el último partido.
Tras la derrota en San Sebastian que dejó al equipo sin opciones de Europa, Baraja expresó que «yo puedo querer un Ferrari pero si tengo que ir en un Skoda…», en referencia a la disparidad que hay entre la ambición de él y su equipo por llegar a Europa y las armas que Meriton le brinda para ello. A modo de aclaración, el Pipo explicó que hizo esa comparación porque «(Skoda) es un coche con buenas prestaciones. Somos un equipo combativo, trabajador, que al final es lo que representa para mí. Es el coche que uso día a día. Nos gustaría trabajar lógicamente con la intención de poder estar y mirar más hacia arriba (Ferrari)».
Sin embargo, la realidad es otra y el Valencia termina otra temporada más sin clasificarse para competición Europea. Contando ya la próxima campaña, el valencianismo vivirá un ciclo de once años con hasta ocho ausencias, cinco de manera consecutiva, con el único matiz de que la primera no lo hizo por la herencia del curso previo. En definitiva, siete de diez sin clasificación europea con Peter Lim como máximo accionista. Los diez años anteriores a la llegada del singapurense, el Valencia CF siempre jugó competición europea. Esa degradación deportiva también ha provocado que el club desaparezca al término de esta temporada del ranking UEFA. En estos momentos, el Valencia CF de Meriton era el 94 clasificado para el máximo organismo del fútbol europeo en base a los puntos obtenidos en los últimos cinco años.