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Si hay una reina en los Juegos Olímpicos de París 2024 esa es Simone Biles. La campeona mundial y ganadora de 39 medallas olímpicas (con las dos últimas serían 41 ya) ha vuelto a esta cita deportiva por todo lo alto. Los amantes de la gimnasia artística y del deporte general están disfrutando de lo lindo con la vuelta de Biles a la competición del más alto nivel y lo ha hecho por la puerta grande: por el momento ya lleva dos oros en estas olimpiadas y todavía quedan varias finales que se celebrarán este fin de semana.
La deportista de la eterna sonrisa no solo brilla sobre el tapiz sino que ahora el documental que ha protagonizado para Netflix está siendo todo un éxito y ya se ha posicionado como uno de los contenidos más vistos de la plataforma. ‘Simone Biles vuelve a volar’ se estrenó a mediados de julio, poco antes del comienzo de los Juegos Olímpicos, y en él se acompaña a Biles en su preparación para París pero se remonta a uno de sus episodios más complicados profesional y personalmente de la deportista de 27 años.
Qué son los twisties en gimnasia
Fue después de las Olimpiadas de Tokio en 2021 en plena ola covid. Biles llegó a la capital nipona para competir como miembro del equipo estadounidense y también en categoría indivudual. Sin embargo, cuando apenas habían comenzado los juegos, la joven decidió retirarse lo que provocó un auténtico tsunami de preocupación (e indignación) entre los seguidores de su deporte.
Simone Biles ejecutando su programa en las barras asimétricas / AP
Pero ella ya intuía que no estaba en su máximo nivel antes de aterrizar en Tokio porque estaba sufriendo lo que se conoce comos twisties. Este término proviene de la palabra en inglés ‘twist’ que significa girar aunque en realidad lo que le padece el gimnasta que lo sufre es un bloqueo mental.
Por qué son peligrosos los twisties
Pese a que este tipo de bloqueo afecta a cualquier tipo de deportista en el caso de los gimnastas es especialmente peligroso. Y lo es porque si se sufren es cuerpo y mente no están bien conectados y las posibilidades de sufrir un accidente son muy altas. Sobre todo si se se están realizando deportes que requieren una precisión milimétrica a una considerable altura del suelo.
Los twisties en gimnasia puede provocar que el deportista pierda la noción del espacio y la dimensión cuando se encuentre haciendo alguna figura en el aire y puede llevarle a ejecutar algún movimiento que no tenía programado, olvidarse del ejercicio e incluso caer en una mala postura que resulte tremendamente peligrosa para su integridad física.
Este bloqueo mental sumado a la enorme presión a la que se vio sometida provocaron que Simon Biles se tomara un descanso en su carrera deportiva. Durante estos años cuidó su salud mental, consiguiendo que se hablase del tema públicamente, declaró en el juicio contra Larry Nassar, el exmédico de la selección estadounidense que abusó sexualmente de numerosas deportistas, y se casó con el jugador de la NFL Jonathan Owens.
Por fin Biles ha vuelto a la más alta competición y lo ha hecho para dejar claro que ha superado sus episodios de oscuridad y vuelve a hacer felices a los millones de seguidores de la gimnasia artística que la consideran una auténtica reina.
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