Mejor imposible para empezar el año. Un triunfo de prestigio ante el Anadolu Efes (93-88) y, de paso, el basket-average recuperado tras un partido en el que los taronja fueron de menos a más pero que acabaron ganando con una demostración de garra y ambición ante un rival que llegaba con el temido Larkin, autor de 20 puntos. Eso sí, con hasta seis jugadores taronja con 10 o más puntos en una demostración de juego coral.
Con los descartes de Josep Puerto y del recién llegado Kevin Pangos y la entrada de un recuperado Jared Harper, el Valencia BC arrancaba su primer partido del año con Jones, Robertson, Ojeleye, Reuvers y Touré en el quinteto inicial. Sin acierto en el tiro en los primeros minutos, los taronja se vieron sorprendidos por un Anadolu Efes que con triples de Bryant y Larkin y una canasta de Oturu abrían el partido con un parcial de 0-8.
Los locales no anotaron hasta casi el ecuador del primer período con un mate de Boubacar Touré, pero lejos de dejarse llevar por la inquietud del marcador, los de Mumbrú supieron dar la vuelta al mismo antes incluso del final del primer cuarto, liderados por un Jones decidido a no dejar que Larkin acaparara todos los focos.
Fue Ojeleye quien puso por primera vez a los taronja por delante (14-13) en medio de un parcial de 9-0, aunque el intercambio de canasta final entre Inglis y Tyrique Jones llevaban el marcador al 18-18.
Brandon Davies, que salió desde el banquillo, empezaba a hacer daño en la pintura al inicio del segundo cuarto y junto a Inglis y Anderson, que jugaba sus primeros minutos, fue clave para mantener la igualdad antes del ecuador del período, cuando Harper puso a los locales por delante con un triple (29-26).
A partir de ahí, se sucedieron un parcial de 0-9 y otro de 10-0 que dejaron las cosas prácticamente como estaban, pero con el peligroso despertar de Darius Thompson, quien junto a Beaubois y Larkin, contribuyó a que los de Erdem Cam se fueran a vestuarios con un 57% de acierto en triples y con ventaja en el marcador, después de un último lanzamiento de Larkin sobre la bocina que puso el 43-45. La Fonteta despedía con pitos a los árbitros, con el recuerdo de una clara falta no pitada sobre Reuvers que debía acabar con un tiro libre adicional. Y con Inglis como gran referente taronja, con 11 puntos, 3 rebotes y 17 de valoración, sin fallos en los primeros 20 minutos.
Mumbrú apostaba por la dupla Jovic-Jones al inicio de la segunda parte, aprovechando la polivalencia del estadounidense en un recurso que irá a más con la llegada de Pangos. El propio Jones no tardaba en anotar para ayudar a un inspirado Davies en la faceta anotadora. Mientras, el extaronja Tibor Pleiss sorprendía anotando dos triples y ocho puntos para mantener su ventaja (53-55).
Nadie lograba poner tierra de por medio pese a cuatro puntos seguidos de Tyrique Jones y los posteriores triples de Davies y Harper, que hacía daño también con su velocidad y visión de juego.
Los taronja se dejaban la piel por cada balón y La Fonteta lo agradecía intentando llevar en volandas a los suyos, que con un parcial final de 9-0 por medio de Harper, Inglis, Ojeleye y Reuvers, afrontaban los últimos diez minutos del partido con +5 (71-66).
Con 9 de 10, los taronja lograban corregir el problema de los tiros libres de los últimos partidos y se cargaban de confianza de cara a un posible final de infarto. Reuvers, con un triple, ponía en pie a La Fonteta en la vuelta a la pista, pero la ventaja duró poco después del tercer triple de Pleiss y de que Larkin anotara de nuevo desde el 6,75 (74-73). Reuvers volvía a anotar de tres, forzaba una falta en ataque y López-Arostegui y Ojeleye llevaban la euforia a la afición al poner el 86-79.
La Fonteta rugía, la defensa taronja rozaba la perfección y los fallos en los tiros se solventaban con rebotes ofensivos, hasta el 91-82.
Bryant, con un triple, intentaba devolver la esperanza a los suyos a menos de un minuto para el final. Una buena defensa del Efes propició la pérdida de López-Arostegui y tras varios fallos en el tiro, el balón le volvió a caer a Bryant en el 6,75 para poner un inquietante 91-88 a 15 segundos del final. Harper logró escapar de una falta rápida y cuando se la hicieron, no falló y sentenció con el 93-88 final.