Cuando España llegó a Berlín el pasado 14 de junio para disputar su primer partido de la Eurocopa ante Croacia, el grupo se conjuró para regresar a este estadio Olímpico de Berlín una segunda vez. El motivo era obvio, de ser así, estaría en la final del torneo.
Lamine avisó antes de Croacia
Pero además de esa declaración de intenciones, que se vio alimentada por una victoria contundente ante la Croacia de Modric (3-0), hubo otro aliciente para cumplir ese deseo coral del grupo. Lamine Yamal Nasraoui Ebana tomó la palabra y le dijo a sus compañeros: “Quiero celebrar mi cumpleaños aquí”. No se lo pidió al vestuario, ni lo comentó como una anécdota. Estaba informando sobre lo que iba a hacer. Y él ha sido uno de los grandes ‘culpables’ de que vaya a ser así. El extremo del Barcelona se ha echado, a sus 16 años, el equipo encima anotando un gol y dando tres asistencias en los cinco partidos en los que ha participado. Este sábado, 13 de julio, el azulgrana cumplirá 17 años y ha pedido a sus compañeros ganar la Eurocopa como regalo de cumpleaños.
Y no es el único. Un día antes, el 12, Nicholas Williams Arthuer, el delantero del Athletic de Bilbao también celebrará su cumpleaños. Nico cumplirá 22 años y ha planeado ganar la Eurocopa con su ‘bro’ Lamine. Ha querido el destino que los dos jugadores que le han cambiado la cara a la selección y ha dinamitado el torneo con su desequilibrio y su exuberancia ofensiva cumplan años con un día de diferencia y 24 horas antes del partido más importante de sus vidas.
Nadie podía pensar que España llegaría a este 14 de julio en la situación en la que llega. Deslumbrando con el mejor fútbol de la Eurocopa tanto en lo ofensivo como en lo defensivo, y después de dejar por el camino, además de a Croacia, a tres selecciones campeonas del mundo como Italia, Alemania y Francia. Inglaterra completará el póker, el camino más complicado transitado jamás por una selección en la historia de la Eurocopa puede y debe acabar con la mayor fiesta de cumpleaños que se recuerda en tierras teutonas.
Tanto Lamine como Nico han pospuesto la celebración para la noche del domingo. Antes soplarán las velas, como acto protocolario, y soportarán los tirones de oreja de los compañeros y alguna broma. Pero están centrados en coronar su descomunal mes levantando una Eurocopa tras un torneo en el que han vuelto a engañar al país a la selección, como ocurrió en 2008 con la selección que dirigía Luis Aragonés.
“Los potros salvajes” maravillan a Europa
“Los potros salvajes”, como se les ha bautizado por la canción que han convertido en himno oficioso de la selección durante esta concentración en la Selva Negra, llegan a Berlín en el mejor momento de sus carreras. Pese a su juventud, todos los puestos están centrados en ellos. Los dos extremos le han cambiado la cara y el estilo a esta España mutante capaz de desplegar el tiqui-taca que recibieron como legado de la generación de oro, o darle verticalidad por fuera con su desequilibrio rompiendo cualquier defensa a la que enfrenten. Los dos han recibido un premio al mejor jugador del partido. Nico ante Italia, con un encuentro deslumbrante, y Lamine ante Francia, con un partido majestuoso. El pamplonica suma ya 19 partidos como internacional y el de Esplugas jugará su partido número 14 en Berlín. Los dos han anotado tres goles y esperan aumentar ese casillero ante Inglaterra.
Poco les importa a ambos que España tenga un saldo negativo después de 27 partidos contra Inglaterra: 10 victorias, 4 empates, 13 derrotas con 32 goles a favor y 45 en contra. Porque han venido a Alemania a cambiar la Eurocopa y lo están haciendo juntos, tras construir una amistad sólida que comenzó a forjarse en septiembre de 2023 en Tiblisi. El día que Luis de la Fuente decidió alinearles juntos por primera vez con la selección. Desde aquel día hasta ahora la vida de los dos ha cogido velocidad y solo ellos saben hasta donde les llevará esta historia que acaba de comenzar. El viernes Nico cumple 22 años, el sábado Lamine tendrá 17, y el domingo los “potros salvajes” quieren hacerse la foto de cumpleaños con la Eurocopa. El final perfecto a un mes de ensueño.