La Fundació València Diversitat, Lambda, Avegal y Dracs han anunciado oficialmente su retirada definitiva de la organización de los Gay Games 2026 en València “debido a las políticas de recorte de derechos Lgtbiq+ y el secuestro del proyecto por parte del gobierno del PP y Vox”. La Fundació València Diversitat (FVD), junto con sus entidades miembros, Lambda – Col·lectiu LGTB+ per la diversitat sexual, de gènere i familiar (Lambda), Avegal Asociación de empresas y profesionales para lesbianas, gays, transexuales y bisexuales de la Comunitat Valènciana (Avegal) y Club Esportiu LGTBI+ Dracs València (Dracs), han anunciado “su retirada definitiva del proyecto Gay Games València 2026. Esta decisión se toma “como única respuesta posible tras el secuestro de la organización del proyecto por parte del Ayuntamiento de València y la Generalitat Valenciana, gobernados por el Partido Popular y Vox”, señalan estas organizaciones.
Durante los últimos cuatro años, “la FVD y sus organizaciones miembros han trabajado incansablemente junto a la Federación de Gay Games, para organizar un evento inclusivo, diverso y respetuoso con los valores y derechos de la comunidad LGTBIQ+ y demás colectivos en riesgo de exclusión”, subraya un comunicado emitido por estos colectivos. Sin embargo, “el cambio en el panorama político tras las elecciones de 2023 ha puesto en peligro estos principios fundamentales”, matizan estas fuentes.
Hay un control “férreo sobre cualquier aspecto del torneo”
La estructura original de gestión de los Gay Games 2026, liderada inicialmente por las entidades Lgtbiq+, con la colaboración y soporte de las administraciones valencianas, “ha sido sustituida por un comité organizador creado ad-hoc por el actual gobierno del Ayuntamiento de València”. Legalmente, esta nueva estructura permite al ayuntamiento “mantener un férreo control sobre cualquier aspecto del torneo, sin obligarse a tener en cuenta la opinión o voto del resto de miembros del comité”. Ello ha llevado a las entidades a temer “que no se respetarán aspectos irrenunciables del proyecto original, poniendo en riesgo la integridad del evento, motivo por el que se han visto obligadas a abandonar el proyecto de forma definitiva”.
No sólo eso, con tan sólo un tercio del peso de los votos, pero toda la responsabilidad en la ejecución del proyecto, “de aceptar la estructura impuesta desde el ayuntamiento gobernado por Mª José Catalá, las entidades Lgtbiq+ se verían obligadas a cargar con las posibles consecuencias fiscales, penales y legales de las decisiones tomadas por PP y Vox”.
“Ninguna organización del colectivo respalda este evento”
“La salida del proyecto por parte de las entidades sociales y del empresariado Lgtbiq+ implica que a día de hoy ninguna organización de estos colectivos respalda este evento”, advierten estos portavoces. De continuar adelante con los Gay Games 2026 en València, “estos se desarrollarían sin el apoyo del colectivo, en lo que supondría un gran descrédito, no sólo para la competición en sí misma, sino también para su entidad licitadora, la Federación de Gay Games”. “No resultaría ético ni viable continuar adelante con unos Gay Games sin contar con el apoyo ni la participación del propio colectivo, en un caso absurdo de ‘Todo para el pueblo, pero sin el pueblo’”, comentan los responsables de la Fundació València Diversitat.
Además, esta decisión debe entenderse también dentro del actual panorama social, “con el avance de la ultraderecha en buena parte de Europa y la cercanía de las próximas elecciones europeas, y como respuesta a las políticas de recorte y ataques a los derechos Lgtbiq+ del actual gobierno de PP y Vox en la ciudad y región de València”.
A la retirada de libros infantiles, películas y obras de teatro que aborden realidades Lgtbiq+, o el recorte en campañas y servicios de asistencia a estas personas, “se han unido recientemente las amenazas y ataques directos a entidades de este colectivo, como Lambda quien, junto a Avegal, recientemente denunciaban el intento por parte del ayuntamiento de controlar y politizar la marcha del Orgullo, como una maniobra de pinkwashing o blanqueo de sus políticas en contra del colectivo”. Así mismo, Lambda y otras organizaciones también censuraban “la usurpación de puestos en los Consejos consultivos Lgtbiq+ y Trans de la Comunitat Valenciana por parte de cargos políticos del PP, en contra de sus propios estatutos, llegándose al sinsentido de designar a un alcalde de dicho partido como representante trans en el consejo autonómico”.
Por todos estos motivos, la FVD, Lambda, Avegal y Dracs, han señalado que su decisión de retirarse “definitivamente de la organización de los Gay Games València 2026” es “una medida necesaria y la única responsable para proteger el proyecto original de los Gay Games València 2026, así como los derechos y la dignidad de las personas y comunidad Lgtbiq+.
La Fundació València Diversitat cree que deberían hacerse en Munich
Así se lo han trasladado ya a la Federación de Gay Games, aclarando que la FVD no se opone a los Gay Games 2026 en sí mismos, “sino a su celebración en la ciudad de València bajo las condiciones actuales”. De hecho, la FVD ha querido reafirmar su apoyo pleno a la posibilidad de trasladar el evento “a cualquier otra ciudad más respetuosa con los derechos Lgtbiq+, como pudiera ser Múnich, que en su momento ya se presentó como candidata y ha mostrado interés en acoger los juegos”. En caso de que la Federación de Gay Games decidiera finalmente mantener València como sede de los Gay Games 2026, “la FVD ya ha anunciado que lamentablemente se verá obligada a oponerse firmemente al proyecto y llamar al boicot del evento a nivel local, nacional e internacional, teniendo la certeza de que contará con la comprensión y apoyo de múltiples entidades y organizaciones amigas, así como de la sociedad en general”.