LaLiga ha solicitado a la jueza Delia Rodrigo personarse como acusación particular en el caso Supercopa al entender que “parte de los fondos aportados” a la RFEF de Luis Rubiales, un total de 447 millones de euros durante todo el mandato del ex presidente federativo, “habrían sido presuntamente detraídos por parte de los investigados de aquellos fines para los que fueron concedidos”, según se recoge en el sumario del caso, al que ha tenido acceso EL PERIÓDICO DE ESPAÑA, del mismo grupo editorial.
“Dado el muy relevante importe económico aportado por mi patrocinada a la RFEF durante los últimos años, resulta más que probable que dichos fondos hayan resultado detraídos o utilizados para fines ajenos de aquellos para los que resultaron concedidos“, asegura la procuradora de LaLiga en el escrito que remitió el pasado viernes al juzgado de primera instancia número 4 de Majadahonda que instruye el caso.
El principal argumento de LaLiga para defender su solicitud de personación en la causa tiene que ver con los presuntos sobrecostes de hasta 5,7 millones de euros en viajes pagados por la RFEF de Rubiales, recogidos en uno de los informes elaborados por la Unidad Central Operativa (UCO) de la Guardia Civil. En este punto, la institución presidida por Tebas recuerda que, según los acuerdos vigentes, LaLiga paga la factura de los viajes de los árbitros de Primera y Segunda División y el resto de miembros del Comité Técnico de Árbitros.
Sobre estos presuntos sobrecostes, Globalia, empresa propietaria de Air Europa que firmó un acuerdo con la Federación dirigida por Rubiales, emitió la semana pasada un comunicado en el que sostienen que la relación entre la empresa y la RFEF “se ha enmarcado siempre en las actividades propias de esas empresas y se ha ajustado absolutamente al rango de precios existentes en el sector”.
La Supercopa en Arabia Saudí
En otro apartado del escrito, LaLiga también apunta a la organización de la Supercopa y a los “intereses espurios contrarios a los valores del deporte” con los que la RFEF tomó, presuntamente, las decisiones relativas al campeonato que se disputa desde hace unos años en Arabia Saudí. Por ello, LaLiga solicita su personación como acusación particular, condición que ya ostenta desde el comienzo de la instrucción su presidente, Javier Tebas.
Este escrito de LaLiga permite, de paso, constatar que la Real Federación Española de Fútbol (RFEF) facturó 447 millones de euros a LaLiga durante los cinco años de presidencia de Luis Rubiales al frente del organismo federativo. En el desglose de cantidades, queda de manifiesto que Rubiales llegó a triplicar las facturas emitidas a la asociación que preside Javier Tebas. En la última temporada sin Rubiales al frente (2017-18) abonó 30 millones de euros en pagos y en la última de ellas (2022-23) pagó casi 91.
El cuadro que LaLiga adjunta en su escrito de personación permite observar la evolución de las cantidades que ha ido aportando a la RFEF en las últimas temporadas. En la primera temporada de Rubiales, la 2018-19, ya se produce un incremento sustancial de la factura, en un contexto de recuperación de competencias por parte de la RFEF.
Los pactos de Viana con el Gobierno
El otro gran salto llegó en 2020 y se justifica por la firma de los pactos de Viana, acuerdos alcanzados en abril de 2020 entre el CSD, LaLiga y la RFEF, con la intervención decisiva de la secretaria de Estado para el Deporte, Irene Lozano, para marcar la hoja de ruta en el retorno del fútbol tras el coronavirus, incluyendo el rescate del deporte y los deportistas. Con este nuevo acuerdo, LaLiga disparó su aportación a dichas entidades un 54%, hasta los 95,5 millones de euros.
Así, los 90,91 millones del último año completo de Rubiales en la presidencia federativa, poco tienen que ver con los 30,6 que Ángel María Villar recibía cuando le entregó el bastón de mando al de Motril, tras la interinidad de Juan Luis Larrea. Triplicó la inversión y al final de su mandato la cifra total de inversión de LaLiga Tebas en la RFEF de Rubiales ascendió a la cifra de 447,328.087,92 euros.
Como reza en su escrito la procuradora de la asociación de clubes, “ingentes cantidades económicas en virtud de lo establecido en los distintos Convenios de Coordinación” para financiar ayudas al fútbol no profesional, abonar costes arbitrales y contribuir a ciertos gastos propios de la RFEF. Tebas pagó, a regañadientes, parte de la fiesta de Rubiales y ahora quiere cerciorarse de que todo el dinero acabó donde debía. Porque sospecha que no fue así.