En el fin de semana previo al inicio de la Eurocopa, la Ciudad Deportiva Fernando Santos del Getafe fue escenario de una lección de fútbol verdadero, de ese que importa y que no solo se mide en goles, sino en emociones y valores. Allí se celebró la fase final de LaLiga Genuine, una competición que destaca por su carácter inclusivo y su capacidad de superar barreras.
LaLiga Genuine es una liga pionera en el ámbito mundial, compuesta por equipos de personas con discapacidad intelectual y desarrollada por los clubes de LaLiga a través de su Fundación. Desde su creación en la temporada 2017/2018, esta iniciativa tiene como objetivo principal normalizar la práctica del fútbol en este colectivo, promoviendo la inclusión social y el compromiso de los clubes profesionales.
LaLiga Genuine se ha disputado este fin de semana en Getafe. / LALIGA
Más que una competición deportiva
Más que una simple competición, LaLiga Genuine es una celebración de valores como el respeto, el compañerismo y la deportividad. En Getafe, la última fase de la competición brilló con el sentimiento de que el fútbol está para unir a todos los equipos participantes.
Ataviados con los uniformes oficiales de los 46 equipos participantes, jóvenes y adultos demostraron que el fútbol es, por encima de todo, compañerismo e integración. Más de 700 jugadores y jugadoras participaron bajo el paraguas de los clubes, mostrando que cada gol marcado importa menos que el hecho de que se esté jugando un partido entre equipos inclusivos como el Betis, el Real Madrid, el Barça o el Zaragoza.
46 equipos se han reunido para la fase final de LaLiga Genuine. / LALIGA
Una oportunidad para los jugadores
Los jugadores tienen la oportunidad en esta fase final de demostrar todo lo aprendido y medirse por última vez en esta temporada a sus rivales, que más que eso, son amigos y compañeros.
Lo principal es venir con mis compañeros y técnicos que nos apoyan hasta que podamos marcar un gol
Yoli, jugadora del Betis, nos cuenta cómo es participar en LaLiga Genuine: “Hemos disfrutado las cuatro fases, hemos conocido a gente de muchos sitios y lo hemos pasado muy bien. Marcar nos da orgullo, pero si no se puede, no pasa nada; venimos a disfrutar. Lo principal es venir con mis compañeros y técnicos que nos apoyan hasta que podamos marcar un gol”.
Isa, también jugadora del Betis, destaca la “emoción” de jugar en LaLiga Genuine y sueña con “dedicarle un gol a su abuelo”.
“Lo más emocionante del torneo es esta fase final, estar con la familia y viajar con los compañeros. Si ganamos, habrá fiesta; si no, iremos un poco de bajón”, nos cuenta Andrés, jugador del Oviedo.
Diogo, jugador del Barça Genuine, nos explica el sentimiento de grupo que se forma en el equipo: “La familia que hemos creado es lo mejor. Lo que más nos gusta es disfrutar, competir y hacer lo que podamos, cada uno con sus límites, pero hemos venido a pasarlo bien y a animar”.
Los técnicos, un pilar en el equipo
Los clubes conforman un cuerpo técnico para guiar y entrenar a los jugadores con la misión de ser competitivos pero sobre todo de gestionar un grupo con el objetivo de que el fútbol sea un elemento integrador.
Juan, entrenador del Betis, nos explica la evolución de los equipos: “Es muy fácil trabajar con el equipo; no tienen límites en lo deportivo. Es bonito ver la evolución de los jugadores, cómo progresan coordinativamente y a nivel táctico. Lo importante es que disfruten, que no haya altercados y que el comportamiento sea deportivo y correcto”.
Trabajamos bajo el lema de que somos una familia
Para Carlos, entrenador del Real Oviedo, lo importante es el grupo que se conforma: “Es un orgullo que los jugadores tengan la oportunidad de competir y participar con otros equipos. Trabajamos bajo el lema de que somos una familia, y muchos de ellos tienen circunstancias personales muy difíciles. Sentirse parte de una familia es lo más importante”.
“Para el colectivo de personas con diversidad funcional o discapacidad intelectual, a veces es muy difícil encontrar este tipo de torneos. Además de goles, aquí hay compañerismo y respeto al rival y a los árbitros“, añadió.
Jordi Palau, entrenador del Barça Genuine, explica que el estilo del club también está presente en el equipo Genuine: “Lo mejor es el compañerismo, la familia que se forma. Antes de jugar, ya es una victoria. Intentamos transmitir nuestro estilo de juego característico, hacer juego combinativo. La recompensa es ver sus caras de felicidad. En el equipo de la fundación somos 28 jugadores; hemos convocado a 16 y los no convocados han venido a la grada a animar. Es la mayor satisfacción, tener una familia jugando cada semana”.
Son jugadores que no nos encontramos en las ligas habituales, con un sentimiento, un fair-play y unas ganas de jugar increíbles
La liga de las estrellas para la Fundación LaLiga
La directora de la Fundación LaLiga, Olga de la Fuente, no duda en calificar a LaLiga Genuine como “uno de nuestros proyectos más maravillosos, es nuestra Liga de las estrellas”. “Para LaLiga es un verdadero orgullo, culminamos ahora la sexta temporada con la participación de 46 clubes, 1400 jugadores inscritos, 300 miembros de los cuerpos técnicos y 550 personas que actúan como voluntarios, que también es una una cifra muy importante y demuestra la implicación con el proyecto”, añade.
De la Fuente señala los objetivos del proyecto: “Desde LaLiga queremos seguir avanzando en favor de este colectivo, de estas personas auténticas, maravillosas y seguir derribando barreras entre todos, desde el fútbol profesional, barreras que nos ayuden a normalizar y a trabajar en favor de la inclusión y de la diversidad”.
LaLiga Genuine, un proyecto inclusivo. / LALIGA
Los clubes que forman parte de LaLiga Genuine tienen el compromiso de integrar al equipo Genuine dentro de la estructura deportiva del club, al igual que el primer equipo o la cantera. Olga de la Fuente nos da los detalles: “Tienen que integrar al equipo con todo tipo de beneficios para los jugadores, es decir, que vayan a entrenar semanalmente, que vistan la equipación oficial del club, que entrenen en las instalaciones deportivas del mismo y que estén asegurados”. “Tienen que adquirir un compromiso real arropando al equipo durante todo el año y que los chicos tengan ahí su espacio, donde encuentren amigos y se desarrollen no solo deportivamente, sino también a nivel personal y a nivel de sociabilidad, creciendo en su autoestima y en su autonomía”, concluye de la Fuente.
Una experiencia gratificante para los árbitros
Los partidos de LaLiga Genuine son arbitrados por colegiados de la RFEF. Rafael Hidalgo, árbitro del colegio madrileño, comparte su experiencia: “La verdad, está siendo una experiencia supergrata. Son jugadores que no nos encontramos en las ligas habituales, con un sentimiento, un fair-play y unas ganas de jugar increíbles. El público es mil veces más educado y me ha sorprendido la gente que ha venido a verlos desde tan lejos”.
Actualmente se está trabajando en conformar también un cuerpo arbitral con colegiados con discapacidad intelectual.
Un ejemplo para el mundo
LaLiga Genuine también sirve como modelo para proyectos de fútbol inclusivo en todo el mundo. Luis Córdoba, organizador del proyecto Cordica 21 en México, organiza torneos para jugadores con Síndrome de Down, estuvo presente en Getafe y comentó: “La organización está espectacular. El marco de este torneo, los uniformes, tantos equipos… sabíamos que era importante, pero esto está muy por encima de lo que habíamos imaginado. Esto es una locura, estamos extasiados”.
Ganadores
En las finales de Getafe se han terminado de definir los campeones del grupo Inclusión, el Espanyol y del grupo Superación, el Real Oviedo. También se han dado los premios al ‘Fair Play’ que votan los árbitros del campo y los técnicos de la mesa del partido, para Córdoba y Burgos.
Pero la gran victoria ha sido para todos los participantes de una LaLiga Genuine que es más que una competición; es una celebración del espíritu humano y del poder del fútbol para unir a las personas.