Hasta hace una semana, la Real Sociedad de Imanol Alguacil estaba viva en tres competiciones. De hecho, era favorita ante el Mallorca en la vuelta de semifinales de la Copa del Rey. Todo, a pesar de estar en el peor momento de la temporada. La eliminación en penaltis desmoronó la autodefensa mental de un equipo que hoy tendrá la difícil tarea de remontar un 2-0 en Anoeta ante el PSG. En las más de tres décadas del estadio, solo un intento de darle la vuelta a una eliminatoria fue positivo: en la temporada 1997/1998 con el actual técnico ‘txuri-urdin’ como jugador.
Para el duelo decisivo de Champions se ha recuperado aquel recuerdo. Las matemáticas del pasado no son sinónimo de nada, pero alimentan el espíritu de noches como la que espera vivir la Real Sociedad. Era el 7 de enero de 1998 cuando el equipo dirigido por Bernd Krauss recibió al Xerez CD en el desenlace de la tercera ronda de Copa del Rey. En la ida, el cuadro andaluz había vencido 1-0. El conjunto realista le hizo un regalo de Reyes a su afición con un 4-2 que tuvo a Darko Kovacevic como gran protagonista.
Precedente más reciente, contra la Roma el año pasado
El delantero serbio anotó un triplete en la primera parte. La goleada la completó Craioveanu. Alguacil, lateral derecho, titular en los dos partidos de aquel cruce, hizo de asistente en uno de los tantos. Fue su última temporada como jugador de una Real Sociedad que, desde entonces, no sabe lo que es darle una vuelta a una eliminatoria en Donosti. El resto de intentos salieron mal. Desde el primero, en 1995, cuando el Numancia de Lotina (Segunda) ganó en penaltis en Anoeta; hasta el más reciente de la pasada temporada, frente a la Roma de Mourinho en Europa League.
El equipo italiano, que terminaría perdiendo la final del torneo ante el Sevilla, hizo bueno el 2-0 -mismo resultado con el que viaja el PSG– que logró en el Olímpico. El 0-0 de la vuelta no cambió nada en aquellos octavos de los que se acuerda bien Imanol Alguacil. Así lo hizo saber en la previa: “Tengo en mente una de las ocasiones que tuvimos en el minuto 70 para entrar en la eliminatoria. No estoy para nada de acuerdo con que sea importantísimo hacer goles en los primeros minutos”.
El entrenador de la Real Sociedad se refirió a una doble oportunidad de Mikel Oyarzabal. Antes del descanso, a la Roma le anularon un tanto. Por lo que ese primer gol será el más importante del partido. Si es que se produce. De ello es igualmente consciente Luis Enrique. “Cuando juegas fuera de casa hay variables que influyen en la dinámica del partido. Un acierto lo puede a cambiar todo. Va a ser muy difícil, pero a nosotros este encuentro nos llega en el mejor momento“, reivindicó el técnico del PSG.
Mbappé y Luis Enrique: “Puede ser que sí, puede ser que no”
Curiosamente, ‘Lucho’ fue protagonista, en el otro bando, de la debacle histórica que sufrió el campeón francés en el Camp Nou en 2017. El Barça remontó un 4-0 en su última gran noche europea. Tampoco le bastó la renta de un gol ante el Real Madrid en 2022. Ni siquiera ponerse por delante en el Bernabéu con un gol de Mbappé, aplaudido aquel día, antes del desplante del verano. Fue una víctima más de la Champions ‘imposible’ de los de Ancelotti. Por supuesto, el tema central de la comparecencia del asturiano fue Kylian, al que ha sentado en los últimos partidos de Ligue 1. Aunque a él parece no importarle demasiado.
Luis Enrique aguantó el fusilamiento y aprovechó una pregunta sobre el francés para finiquitar la rueda de prensa. La intérprete no entendió la cuestión de un periodista, que fue traducida por otra persona en la sala. Era sobre si Luis Enrique iba a actuar del mismo modo en Champions que en otras competiciones. El preparador aprovechó la confusión: “Si nadie entiende la pregunta y como me ha parecido escuchar va sobre Kylian, seguro que es difícil…”. Tras la carcajada se revolvió: “Puede ser que sí, puede ser que no. ¿Quién sabe?”.
En la Real Sociedad tampoco parece importarles más Mbappé que el resto, a pesar de que su gol soterró una gran primera hora de juego de los donostiarras en la que solo faltó puntería. Una falta de acierto que está lastrando al equipo en sus múltiples objetivos. “¿Mbappé? ‘El’ Dembéle. No sé qué le pasa, que contra nosotros siempre juega bien”, dijo Take Kubo cuando se le preguntó sobre las amenazas del PSG. Apuntó al ex del Barça y máximo asistente de la Ligue 1. Tanto el japonés como Imanol Alguacil dieron importancia al factor anímico, que entra en juego desde el propio recibimiento de la afición.
La primera hora de juego de la ida en París como ejemplo
Se espera corregir lo que sucedió en la vuelta de Copa frente al Mallorca, donde hubo incidentes entre los aficionados y la Ertzaintza, que tendrá que estar pendiente también de los 730 ultras del PSG -de un total de 2.000 desplazados- que estarán presentes en Donosti. Desde la Real Sociedad se ha lanzado un vídeo con el que estimular los recuerdos positivos como la final de Copa ganada en 2020. Pero, de nuevo, el secreto lo tiene Imanol Alguacil, quien se deshizo en elogios por la primera hora del partido de París.
Esta vez no hubo reproches como tras acabar aquel encuentro en el que Hamari Traoré se llevó una bronca de época tras ser atendido durante el tanto de Mbappé. La Real Sociedad defendió con diez esa jugada. “No me explico que un jugador que ha tenido que salir del campo cuando hay un córner en contra no acabe en el hospital. Traoré se fue del partido y, con él, el equipo. Eso es lo que me duele”, recriminó.
Es indudable que Alguacil es un entrenador que ha hecho historia reciente con la Real Sociedad. Con todo, la gestión emocional del vestuario le está pasando factura en el momento más complejo desde su llegada al primer equipo como revulsivo en marzo de 2018. Se vio en la semifinal frente al Mallorca, donde Javier Aguirre le ganó la batalla mental a base de resistencia y liberar a sus jugadores de responsabilidad en los penaltis decisivos.
Imanol se aferra al pasado reciente. “¿Hace unos meses ninguno veíais que la Real Sociedad fuera capaz de pasar como primero de grupo en Champions? Seguramente no. Sé que el PSG tiene una de las mejores plantillas, pero en la ida ya fuimos capaces de jugarles de tú a tú. Claro que se puede”, defendió el único que tiene en su mano la llave para que 26 años después, Anoeta -que no ve ganar a su equipo desde el 26 de noviembre-, ya sin pistas de atletismo, se abra a una nueva remontada.