En el duelo personal para ver quién se lleva más victorias de etapa también domina Tadej Pogacar, cinco triunfos hasta ahora, después de que este jueves Jonathan Milan desaprovechase la ocasión de sumar un cuarto éxito personal en la carrera de su país, aunque ya se ha convertido, de largo, en el mejor velocista de la ronda italiana. Lo derrotó el belga Tim Merlier y perdió la oportunidad de sumar un quinto esprint en Roma, el domingo, en la etapa que bajará definitivamente el telón en la prueba rosa.
Quiso la organización situar una etapa sin mucha salsa entre montañas, como si los dominadores de la general tuvieran necesidad de efectuar una especie de estiramiento a su musculatura antes de afrontar el doble y último menú de montaña, sobre todo el sábado con la ascensión al Monte Grappa que se efectuará en dos ocasiones.
Así que hubo sorpresa. Milan parecía el escogido para ganar en Padua. Siempre se mueve con habilidad, a rueda de los lanzadores de su equipo, pero perdió la colocación y aunque efectuó una remontada espectacular no pudo con Merlier que sumó la segunda victoria en este Giro. Hubo la escapada nuestra de cada día, controlada por los conjuntos del Lidl y el Saudal, que buscaban el esprint que estaba anunciado prácticamente desde la salida.
Las seis etapas de Merckx en 1973
Más manso apareció Pogacar por un día, siempre vestido en rosa y con el Giro en el zurrón. Ahora tiene la ocasión de volver a incrementar su palmarés y hasta de poder alcanzar el hito de seis triunfos de etapa en la ronda italiana que Eddy Merckx consiguió en 1973, en el año donde ‘El Caníbal’ renunció al Tour para intentar el doblete Giro y Vuelta, que consiguió, algo que actualmente y por cuestiones publicitarias sería complicado, ya que su equipo siempre querría que estuviera presente en la ronda francesa.
Pogacar debería ganar las dos etapas de montaña que quedan y hasta puede hacerlo sin necesidad de ataques alocados, solo con la necesidad de que el grupo principal se reduzca para imponer su punta de velocidad en la llegada. El intento parece más fácil este viernes ya que se llega a Sappada (al lado de la frontera austríaca y al norte de Venecia) después de encadenar tres subidas consecutivas. El sábado, la situación se le complica, ya que la cima del Monte Grappa está a 30 kilómetros, siempre en descenso, de la meta.
Por ahora, colecciona récords y poco a poco se va acercando a los registros de Merckx quien antes de cumplir 26 años, en junio de 1971, ya había ganado 4 grandes Vueltas (2 Tours y 2 Giros), 10 ‘monumentos’ (4 Milán-San Remo, 2 París-Niza, 2 Lieja-Bastoña-Lieja, 1 Tour de Flandes y 1 Giro de Lombardía) y 4 vueltas de una semana. Pogacar, con 25 años, sumará el domingo 3 grandes vueltas (2 Tours y un Giro), 7 Vueltas de una semana y 6 monumentos: 3 triunfos en Lombardía, 2 en Lieja y 1 Tour de Flandes.