El Real Madrid se reencontró con la victoria en la Liga Endesa y, tras caer una semana atrás de manera contundente en la pista del Dreamland Gran Canaria, superó al Bàsquet Girona en un duelo donde solo dio muestras de flaqueza durante un breve tramo del segundo cuarto y en el que destacó el francés Vincent Poirier (19 puntos).
Finiquitaba el equipo de Chus Mateo otra exigente semana con tres partidos, algo menos ésta que otras porque todos ellos fueron en casa. Los dos primeros, en Euroliga ante el Maccabi y el ASVEL Villeurbanne, los ganó. El objetivo era firmar la terna triunfal, pero no lo puso sencillo por momentos un rival con la batería cargada después de romper en la jornada previa una mala racha de resultados, coincidiendo con la llegada al banquillo de Fotis Katsikaris.
En el primer cuarto se jugó a lo que quiso el argentino Facundo Campazzo. El base no solo anotó 11 de los 28 puntos de su equipo sino que además repartió 4 asistencias, incluida una entre una nube de jugadores para Alberto Abalde y otra sin mirar que acabó en triple de Mario Hezonja. Pese a que era incapaz de atar en corto al jugador madridista, el Girona resistió durante el tramo inicial, hasta que encajó un parcial de 7-0 que puso el 20-12 en el marcador. En esa distancia se movió el resto del acto inicial, cuyo desenlace no hacía presagiar lo que estaba por venir antes del descanso (28-18, min.10).
Cuatro puntos seguidos de Stefan Djordjevic y un triple de Eric Vila demostraron que los visitantes no habían entregado la cuchara todavía. Ese impulso inicial lo frenó Guerschon Yabuele con sendos 2+1 consecutivos. Pero a pesar de reducir con ello el daño, las sensaciones en uno y otro bando eran distintas a las del primer cuarto. Un 2-8, de nuevo con importante aportación de Djordevic, situó a los suyos a solo tres. De hecho el plantel gerundense llegó a estar a uno, momento en el que la dupla albiceleste Gabriel Deck-Campazzo salió al auxilio para dar aire con un 6-0. Fue un parche útil para que los de blanco se fuesen a los vestuarios con cuatro de ventaja (48-44, min.20).
Ese beneficio lo multiplicaron por más de dos en los primeros compases de la segunda parte, a la que se presentaron con seis puntos sin réplica que obligaron a Katsikaris a pedir un tiempo muerto. Salió de él enchufado Yves Pons, quien sacó del zurrón dos triples. Hubo además un parcial de 0-5. Pero nada de eso sirvió para hacer cosquillas al Real Madrid, que ya había metido la directa rumbo a una nueva victoria (68-58, min.30).
El resto fue conservar lo obtenido, algo que resultó más sencillo que en el primer cuarto, cuando el Girona estaba más fresco y el Real Madrid más tranquilo. Entre Sergio Rodríguez, Mario Hezonja y un Poirier voraz en uno y otro aro, pusieron el broche a la mañana.
Ficha técnica
92 – Real Madrid (28+20+20+24): Campazzo (17), Deck (8), Hezonja (11), Abalde (7), Poirier (19), -quinteto inicial-, Fernández (-), Rodríguez (3) Causeur (5), Musa (7), Alocén (-), Yabusele (13) y Ndiaye (2).
79 – Bàsquet Girona (18+26+14+21): Marcos (7), Iroegbu (16), Martínez (-), Pons (12), Sorolla (2) -cinco inicial-; Colom (4), Goloman (12), Fjellerup (-), Vila (10), Djordjevic (8) y Davis (8).
Árbitros: Carlos Cortés, Jorge Martínez y Esperanza Mendoza. Excluyeron por faltas personales a Davis (min.32).
Incidencias: Partido de la jornada 25 de la Euroliga disputado en el WiZink Center ante 8.513 espectadores.