En la provincia de Málaga se encuentra un pequeño municipio que en primavera lanza un guiño al lejano oriente. El pueblo de Alfarnate , con apenas un millar de habitantes, se transforma cada año en un pedazo de Japón gracias al deslumbrante festival Sakura .Así como los lazos entre Coria del Río y el país nipón han resistido al tiempo, con más de 700 personas apellidadas ‘Japón’ en la actualidad, la localidad de Alfarnate también guarda su propia conexión con la tierra del sol naciente, aunque de una manera más efímera y estacional. El festival Sakura, que celebra la floración de los cerezos , ha catapultado a este municipio a una fama inesperada como el «Japón andaluz ».Durante la primavera, Alfarnate se tiñe de un color especial con la llegada de la floración del cerezo, un fenómeno que encuentra su hábitat propicio en las frescas noches de la región. Para conmemorar este espectáculo de la naturaleza, los lugareños han instituido el Festival Sakura, también conocido como Sakura Matsuri , en un homenaje a la cultura japonesa y su emblemática flor.Este evento, que tuvo su primera edición en 2022, ha arraigado profundamente en la comunidad de Alfarnate. No solo se trata de admirar los pétalos rosados que adornan los árboles, sino de sumergirse en un ambiente que evoca la esencia misma de Japón. Talleres, desfiles, puestos de artesanía y gastronomía dan vida a las calles de este pueblo que tan bien rinde culto a las tradiciones japonesas.El origen del festival se remonta a unos viajeros japoneses que se encontraron con este espectáculo natural durante un viaje por tierras malagueñas. Asombrados por la similitud con su tierra natal, comenzaron a frecuentar Alfarnate, atrayendo consigo a más curiosos. Fue así como surgió la idea de oficializar esta celebración, convirtiendo a Alfarnate en un punto de encuentro entre dos culturas distantes geográficamente pero unidas por la belleza de los cerezos en flor.Un municipio entregado Los preparativos para el festival comienzan mucho antes de que salgan los primeros brotes de los árboles, y son los propios habitantes de Alfarnate los que confeccionan miles de flores de papel que adornan las calles del municipio. Sin embargo, la relación de Alfarnate con Japón va más allá de la floración del cerezo. El municipio alberga un Centro de Interpretación Abierto dedicado a las ocho regiones japonesas, un punto de encuentro con la cultura y tradiciones del país. Además, también dispone de un jardín sakuri , con 47 cerezos en memoria de las 47 prefecturas de Japón, que sirve como tributo permanente a esta conexión cultural.Durante el festival, las calles de Alfarnate se convierten en un homenaje a la cultura japonesa. Un recorrido de azulejos detalla las numerosas localizaciones de Japón, mientras que Sakuri , una niña vestida con atuendo tradicional japonés, encabeza desfiles y ceremonias que celebran la llegada de la primavera y la conexión entre pueblos tan distantes.El festival además, incluye una programación con una gran variedad de actividades que rinden homenaje a la rica cultura japonesa, ofreciendo una experiencia distinta a los habitantes y visitantes de Alfarnate. Exhibiciones de artes marciales como el Aikido y el Kyodo, talleres de caligrafía japonesa y encuadernación, conferencias culturales, talleres, pasacalles… cada actividad está impregnada de la esencia del lejano oriente.
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