El Real Madrid venció (96-85) al Barça este domingo y recuperó el trono de la Copa del Rey en la final de Málaga 2024, cuatro años después de ganarla por última vez y en el Martín Carpena precisamente, para confirmar que con Chus Mateo siguen sumando títulos los blancos.
El conjunto madrileño, campeón de Europa en el cambio de ciclo tras Pablo Laso, saboreó una Copa que venía siendo bastión azulgrana. La defensa del segundo tiempo y la actuación de Vincent Poirier (17 puntos y 8 rebotes), Guerschon Yabusele (15 y 9), Facundo Campazzo (18) y Dzanan Musa (15) encabezó el desquite blanco después de cuatro finales coperas perdidas contra el Barça.
El ‘torneo del ko’ no sirvió esta vez para reforzar un proyecto culé a examen. El Barça llegaba lanzado, en su mejor momento en cinco meses con Grimau después de empezar con muchas dudas y tres Clásicos perdidos. No agarró su oportunidad de crecer con un título este nuevo Barça, frenado por el Madrid de siempre, habitual de finales y ganador de títulos tras la épica Euroliga. Málaga se alió con el Madrid y de nuevo con Campazzo, elegido MVP del torneo como lo fue en 2020. El argentino, de regreso esta campaña al equipo blanco, fue el motor de los suyos en los tres partidos en el Carpena. La Copa se encaprichó del relato blanco en su regreso a la sede malagueña y el Madrid defendió su dominio en el palmarés, con 29 trofeos por los 27 del eterno rival.