La belleza del cielo en una noche cerrada es difícilmente comparable. Y, sin embargo, en muchos sitios resulta inapreciable por la contaminación lumínica. El exceso de luz mata esa sensación. Tras la Declaración Mundial en Defensa del Cielo Nocturno y el Derecho a Observar las Estrellas, la Fundación Starlight creó un sistema internacional de certificación encaminado a impulsar un modo distinto de cuidar y defender el cielo. En aquel momento nació el astroturismo o turismo estelar, un intento de mostrar al visitante los encantos de su diáfana bóveda celeste.
Los primeros Destinos Turísticos Starlight fueron Dark Sky Alqueva, en Portugal, en abril de 2011; la Reserva de la Biosfera de los Valles de los Ríos Leza, Jubera, Cidacos y Alhama, en marzo de 2012, y La Palma, un mes después.
La Fundación Starlight dio a conocer recientemente los cuatro nuevos destinos starlight que se sumaron en diciembre a esta lista. A saber: Cuevas del Becerro, en la provincia de Málaga; la Comarca Monte Ibérico-Corredor de Almansa, integrada por once municipios del sureste Albacete; la comarca Mancha-Júcar-Centro, en el norte-noroeste de la misma provincia, y las Hoces de Segovia, entre los ríos Duratón y Riaza.
Las Cuevas del Becerro es un municipio malagueño situado sobre un pequeño cerro, y tiene como telón de fondo la Sierra de Viján y el el cerro de los Tercios, formando un corredor natural por donde desciende el río de las Cuevas. Es la primera certificación de este tipo en la provincia de Málaga.
La comarca Monteibérico-Corredor de Almansa está en el sureste de la provincia de Albacete, zona de contrastes geográficos y espacios destinados al astroturismo. En la misma provincia está la comarca Mancha-Júcar-Centro, que engloba a los municipios de Barrax, Fuensanta, La Gineta, Minaya, Montalvos, La Roda, Tarazona de la Mancha, Villalgordo del Júcar y Villarrobledo.
Por último, la Fundación ha avalado también el trabajo de las Hoces de Segovia, en Castilla y León. Su territorio se extiende desde las Hoces del río Duratón hasta las del Riaza, con decenas de pequeños pueblos incluidos, muchos de gran belleza, como Sepúlveda, junto al Duratón; Ayllón o Riaza, al otro lado de la N-1, y Montejo de la Vega o Maderuelo, junto a las hoces del Riaza.
En noviembre, la Fundación había incorporado a su lista de destinos los Ancares lucenses, en Galicia, y el municipio de Vimioso, una villa portuguesa perteneciente al distrito de Braganza, en la región de Trás-os-Montes.
Destino Turístico Starlight señala a un lugar visitable con buenas condiciones para la contemplación de las estrellas y protegido de la contaminación lumínica, apto para acoger iniciativas turísticas relacionadas con la contemplación del cielo como parte esencial de la naturaleza. El sello contempla la instalación de señales y paneles informativos para los miradores estelares en los municipios participantes.
La Fundación emite varias certificaciones, entre ellas la de Destinos Turísticos, como los recién incorporados, y las Reservas Starlight, espacios naturales protegidos (ahora hay diecinueve) donde se establece un compromiso por la defensa de la calidad del cielo nocturno y el acceso a la luz de las estrellas.