El deseo del Barça de tener “el mejor contrato del mercado” debido a que la camiseta azulgrana es la que “más se vende en el mundo”, en palabras de Joan Laporta, ha empujado a la directiva a “resolver su compromiso” con Nike, ya sea para forzar un aumento de las condiciones económicas o para romper la relación definitivamente.
La tensión entre el Barça y Nike alcanza el punto más álgido después de 27 años de unión. El club juega con una oferta de Puma, mucho más alta que la cantidad que paga el actual patrocinador, para forzar un aumento o provocar la ruptura. Laporta adujo que “unos incumplimientos flagrantes del contrato” han llevado al Barça a manifestar su voluntad de terminar los vínculos profesionales.
“Les dimos 45 días para resarcirnos de ese incumplimiento, lo que no se produjo y comunicamos que se resolvía el contrato. Ellos respondieron con medidas cautelares, a las que hemos respondido, y veremos la evolución de esas medidas cautelaras para saber dónde estamos”, explica Laporta en ‘El Podcast del presidente Joan Laporta‘, una videoentrevista realizada por Barça Studios que pretende convertirse en el canal de comunicación del dirigente azulgrana.
Laporta no habla de ruptura, pero la postura de la junta es una medida de presión para obtener más ingresos a partir de la esponsorización puramente deportiva, sabida es la necesidad de dinero de la entidad, acuciada por una deuda que apenas se rebaja y frente a la amenaza de otro ejercicio con déficit, lo que provocará, en otras cosas, que el futuro entrenador pueda fichar jugadores para potenciar la plantilla.
El cumplimiento del presupuesto está amenazado por los menores ingresos obtenidos respecto a lo proyectado, y se dibuja en el horizonte la posibilidad de que ele quipo no pueda regresar en noviembre de 2024 al Camp Nou, una promesa de la junta a la vez que una necesidad para incrementar los ingresos ordinarios.