Tras haberse proclamado campeón del mundo de la UFC, el hispanogeorgiano regresará a su residencia habitual de Alicante para reunirse con su equipo, el mismo con el que se inició en las artes marciales mixtas. El Club Climent, dirigido por los hermanos Jorge y Agustín, supone uno de los pilares fundamentales del flamante ganador del cinturón, Ilia Topuria.
Tras aterrizar desde Buenos Aires en 2002, los hermanos Climent lograron fundar seis años más tarde un centro deportivo en la calle Burgos de la capital alicantina que con el tiempo se ha convertido en un semillero de jóvenes talentos en el mundo de la MMA.
Jorge Climent explica que pasaron de tener que ganarse la vida dando clases en gimnasios de la zona a formar una entidad con más de 300 alumnos que se ha convertido en una referencia nacional e internacional en el ámbito de las artes marciales: “Empezamos sin nadie, llegamos de Argentina y como no conocían nuestro deporte ni nuestro método de entrenamiento tuvimos que esforzarnos mucho para ir haciéndole ver a la gente que era lo más efectivo y que funcionaba”, explica el entrenador de Ilia Topuria.
A raíz de la indemnización por un aparatoso accidente de tráfico que sufrió el mayor de los hermanos Climent, nació el gimnasio que hoy está en boca de todos los amantes de este deporte. El preparador argentino explica que los jóvenes talentos que entrenan en este club deportivo tienen un camino mucho más abierto para competir en la UFC, gracias a la estela del vigente ganador del cinturón.
“El sueño de todo luchador es ser como Topuria; llegar invicto como aspirante y ganarle al campeón, pero para poder entrar a la UFC tienen que llevar un mánager porque hay que dar un montón de pasos para que te permitan el acceso, que nosotros ya hemos dado, y que es más fácil poder repetir si estás con nosotros más que en cualquier otro gimnasio del país“, explica el dueño del Climent Club.
Tienen varios alumnos con facultades para seguir la trayectoria del luchador hispanogeorgiano. El hermano del campeón, Aleksandre Topuria, que ya ha firmado un contrato con la UFC y pelea en mayo. Pepe Torres (con un balance de siete victorias y una derrota), Donovan Meseguer (24-7) o Salah Eddine (5-0).
El primogénito de los Climent-Tommasi reconoce que su objetivo siempre fue “llegar a conseguir el título mundial“. “Nuestro camino fue muy difícil desde el principio, por eso haber conseguido este hito nos ha servido para hacer realidad un sueño que esperamos poder repetir con más luchadores nuestros”, dicen Agustín y Jorge muy felices.
Sin embargo, llegar al éxito no ha sido sencillo y crear una comunidad fiel y entregada a sus valores ha requerido un arduo trabajo que deja recompensas notables. “Yo tengo casi 50 años y sigo teniendo ilusión porque todos los días vengo y aprendo algo nuevo de los más jóvenes, y eso es lo que me da la ilusión para seguir”, explica Jorge Climent.
orge sigue una de las peleas en el ring mientras el resto lucha / PILAR CORTÉS
Los valores de una marca
Generar un espacio de respeto, concordia y familiaridad, aprovechando la práctica del deporte para obtener un clima positivo y con espíritu de superación son los valores que intentan transmitir desde uno de los clubes con más cinturones negros de España.
“Intentamos que los chicos que vienen con poca confianza en ellos mismos consigan la seguridad que necesitan, y al mismo tiempo educar a los chicos que acostumbran a hacerle bullying a los demás, tratando de canalizar las energías para que de esto salga algo positivo“, argumentan.
Los luchadores realizan ejercicios de entrenamiento en el Climent Club / PILAR CORTÉS
Además, los preparadores del campeón mundial explican que su filosofía de trabajo intenta romper el estigma social acerca de la violencia que puede asociarse a los luchadores de artes marciales y fomentar el espíritu deportivo y solidario. Jorge Climent agradece el esfuerzo de Ilia Topuria para poder llegar a conseguir el ansiado cinturón. “El orgullo y la felicidad que siento es extrema, no lo termino de digerir porque creo que lo que hemos logrado tiene un alcance mundial” que hoy siembra en los sueños de miles de luchadores llegar a ser como Topuria.