La Superliga contará con 64 equipos masculinos y 32 femeninos, que competirán entre semana (al estilo de las las competiciones europeas que actualmente organiza la UEFA) “con intensidad competitiva y partidos decisivos a lo largo de toda la temporada”.
¿Cómo funcionan las divisiones de la Superliga?
De acuerdo a lo publicado por A22 Sports, promotora de la competición, no habrá miembros permanentes y los clubes participantes “permanecerán en sus ligas domésticas, que serán la base del fútbol europeo”. Se trata de una declaración de intenciones, porque entidades como LaLiga se han posicionado en contra de este modelo, considerando que no es realmente abierto.
Sin embargo, la entidad que preside Bernd Reichart argumenta que el criterio de participación será el mérito deportivo. “Ahora que los clubes pueden determinar su propio futuro a nivel euripeo, queremos seguir hablando con un amplio grupo de actores del fútbol para lograr el objetivo de toda gran competición: crear un espacio donde los mejores compitan contra los mejores, permitiendo que los futbolistas profesionales alcancen su máximo nivel”, explican.
La competición masculina se compondría de 62 clubes distribuidos en tres ligas: la Star League, la Gold League y la Blue League. La Star y Gold League constarían de 16 clubes cada una, mientras que la Blue League tendría 32 clubes. Los clubes estarían repartidos en grupos de ocho y jugarían partidos en casa y fuera, lo que aseguraría un mínimo de 14 partidos al año.
“Vamos a emitir todos los partidos gratis”
Al final de la temporada empezaría la fase eliminatoria, con los ocho mejores clubes de cada liga hasta decidir los campeones. Habría ascensos y decensos entre las tres ligas. En el caso del ascenso a la Blue League, la inferior, se decidiría en base al rendimiento de las ligas nacionales. No habría más jornadas europeas que las ya contempladas y aprobadas actualmente.
De acuerdo con Bernd Reichart, CEO de A22, la Superliga será gratuita para todos los aficionados. “Nos hemos ganado el derecho a competir. El monopolio de la UEFA ha terminado. El fútbol es libre. Los clubes ya no sufrirán amenazas y sanciones. Son libres de decidir su propio futuro. Para los aficionados: vamos a emitir gratis todos los partidos de la Superliga. Para los clubes, los ingresos de los clubes y los pagos solidarios están garantizados”.