El reto de Alcaraz no era fácil. Llegaba a Indian Wells con la responsabilidad de defender 1000 puntos, la ilusión de revalidar el título californiano que logró la temporada pasada y la presión de defender su segunda plaza en el ránking ATP.
Tras empezar la temporada con dudas y sin mostrar su mejor juego, el murciano ha dejado atrás el mal momento por el que pasaba y ha sacado un gran nivel en un momento crucial.
Tuvo un inicio de torneo complicado en su debut ante Matteo Arnaldi, pero, los siguientes partidos con rivales, ‘a priori’, asequibles, los superó con solvencia y efectividad en la pista. Para llegar a la reconquista de Indian Wells, Alcaraz se enfrentó a los grandes favoritos de la edición. Batió en cuartos a Zverev, al jugador del momento, Jannik Sinner, en semifinales, y en la final a Medvedev.
Alcaraz llegaba al torneo californiano con el ránking ATP en juego. Tras el gran momento de Jannik Sinner y con el murciano defendiendo 1000 puntos, Alcaraz debía realizar un gran torneo para mantener el nº 2 del mundo. Tras lograr la victoria en semifinales ante su competidor por la plaza, certificó que seguía siendo, por ranking, el segundo mejor jugador del mundo.
Miami en el horizonte
Pero Alcaraz no tiene tiempo para descansar. Esta misma semana partirá hacia Miami para disputar el Masters 1000 de la ciudad. Arrancará el torneo de diferente manera al de Indian Wells, con las expectativas por lo alto y después de demostrar que vuelve al nivel que demostró la pasada temporada. Alcaraz cayó en semifinales la pasada edición ante Jannik Sinner.
Un Masters 1000 en el que Alcaraz deberá seguir con este buen momento. En caso de ganar en Miami, estaría solo a 280 puntos del n.º 1, Novak Djokovic. También llega con la lucha por la segunda plaza en juego. En caso de que Sinner gane el torneo y Alcaraz caiga antes de semifinales, bajará a la tercera posición del ranking ATP.
La victoria en Indian Wells también le ha beneficiado a nivel mental. Una vez finalizó la final ante Medvedev, se sinceró sobre el mal momento que estaba pasando, tanto dentro, como fuera de la pista: «He pasado por unos meses muy complicados. Digamos que me ha costado encontrarme a mí mismo en estos dos últimos meses. No disfrutaba en la pista, no era yo mismo, así que fue difícil para mí. Significa mucho para mí levantar este título, porque he superado los problemas de mi cabeza, muchos problemas físicos». Su paso por Indian Wells, ha sido un antes y un después en la situación del murciano: «He aprendido que puedes superar todos los problemas que tengas, sin importar cuáles son», explicó. Alcaraz se marcha de California con la reconquista del título, como número 2 del mundo pero, sobre todo, tras reencontrarse con el buen juego y recuperando la ilusión por el tenis. Miami podría ser el escenario perfecto para certificar sus buenas sensaciones.
Españoles en Florida
Alcaraz debutará en el Masters 1000 de Miami en segunda ronda ante Roberto Carballés o Aleksandar Vukic, que juegan en primera ronda. Sin Djokovic, Medvedev y Sinner aparecen como los rivales más peligrosos. Alejandro Davidovich se las verá en segunda ronda ante Kecmanovic o Juncheng Shang. Y Jaume Munar frente a Martín Landaluce. A ellos se podrían sumar los valencianos Pedro Martínez Portero (número 88 del mundo) y Roberto Bautista (100). El primero arrancó la previa de Miami con victoria (6-2, 6-2) ante el belga Alexander Block, y Roberto Bautista jugaba ante el alemán Benjamin Hassan al cierre de esta edición. De ganar en segunda ronda, se añadirán al cuadro principal.
Por otro lado, en el cuadro femenino, Sara Sorribes empezará ante Arantxa Rus, Paula Badosa ante Simona Halep, y Cristina Bucsa frente a Yulia Putintseva.