Carlos Alcaraz no tuvo el esperado estreno en las Finales ATP. El murciano, que en 2022 había acudido solo para recibir el trofeo que ayer alzó Djokovic como número uno al final del año, al haber estado lesionado, debutó ante el alemán Alexander Zverev, quien le remontó tras haber perdido el primer set con un 6-7 (3), 6-3 y 6-4. No tuvo el mejor debut. Alcaraz entraba en la pista del Alpitour con el rostro serio y la tensión del novato y, especialmente, unos resultados en los últimos meses decepcionantes desde el Abierto de EEUU, con solo cinco victorias en tres torneos. Y los nervios se notaron desde el inicio. Alcaraz, ahora, deberá buscar una victoria para mantener las máximas aspiraciones de clasificarse para semifinales. El murciano se enfrentará mañana al perdedor del duelo ruso entre Daniil Medvedev y Andrei Rublev, que juegan este martes (21.00 horas, Movistar).
Alcaraz, pese a la derrota, habló de una experiencia increíble. «Es increíble. Sinceramente, la mejor entrada al campo que he hecho nunca. Fue una experiencia increíble el jugar mi primer partido en el Masters aunque perdiera», declaró tras recibir 16 puntos directos de saque. «Me encantaría estar mejor de forma. Fue realmente difícil, muy difícil. No pude aprovechar las oportunidades que tuve.
Antes del partido de Alcaraz, Novak Djokovic recibió el trofeo como número 1 mundial de 2023. El octavo en su palmarés y nuevo récord del circuito superando al estadounidense Pete Sampras, con siete. El serbio lo consiguió matemáticamente el día anterior, al ganar en su debut ante Holger Rune tras una batalla de más de tres horas y dos raquetas rotas por 7-6 (4), 6-7 (1) y 6-3. Djokovic suma ya 400 semanas como número 1.