Los Grammy abarcan un mareante total de 94 categorías (este año han sumado tres más), pero son cuatro las que centran los focos, y entre ellas, una resulta ser la más apetitosa, la de mejor álbum del año. A lo largo de la historia, cuatro son los artistas que se han hecho más veces con este trofeo: Frank Sinatra, Paul Simon, Stevie Wonder y Taylor Swift, tres ocasiones cada uno. Lo cual significa que, si esta última se impone ahora en la liguilla final con su descollante ‘Midnights’, sumará cuatro y superará a aquellos clásicos, imponiéndose como reina del álbum de todos los tiempos (es decir, desde 1959), a efectos de la Academia de la Grabación con sede en Los Ángeles.
De la 66ª edición de los Grammy, a celebrar este domingo en el angelino Crypto.com Arena (antiguo Staples Center), puede así salir propulsada Taylor Swift como gran acaparadora de galardones (hasta seis en los que está nominada), pero también verse cortocircuitada por alguno de sus competidores. Algunas, en realidad, ya que casi todas son figuras femeninas. En la categoría del mejor álbum, la autora de ‘Anti-hero’ se mide con Miley Cyrus, Lana del Rey, Janelle Monáe, Olivia Rodrigo, SZA, el trío Boygenius y una única voz masculina, Jon Batiste (que hace dos años dio la sorpresa al ganar este galardón y otros cuatro). A por el premio de grabación del año entrarán en escena Billie Eilish y Victoria Monét, y en el de mejor canción se cuela Dua Lipa. Y Monét aparece como la mejor situada a otro trofeo deseado, al del mejor nuevo artista.
La pugna por el gramófono
De hecho, quien más candidaturas acumula, nueve en total, no es otra que SZA, marca artística de Solána Imani Rowe, cuyo primer álbum, con su batida de r’n’b, soul y hip-hop con ganchos pop, se hizo con cinco nominaciones en 2017, y que cuatro años después obtuvo su primer gramófono (la estatuilla de los Grammy) merced al dúo con Doja Cat. Esta vez, la vemos bien situada con su muy elogiado segundo disco, ‘SOS’. Con siete figuran Phoebe Bridgers (de Boygenius), Victoria Monét y el ingeniero de sonido Serban Ghenea, un profesional situado detrás de éxitos de artistas como Swift u Olivia Rodrigo.
Estos Grammy contemplan las obras fonográficas publicadas entre el 1 de octubre de 2022 y el 15 de septiembre de 2023, y entre su jungla de categorías y nominaciones destacan parcelas como la dedicada al pop-dance y al rock. Si bien en el territorio pop dominan igualmente las voces femeninas (Swift, Rodrigo, Eilish y Cyrus en cabeza), el nicho rockero aparece más copado por los hombres, con Rodrigo y Boygenius en dura concurrencia con, sobre todo, grupos masculinos, caso de Arctic Monkeys, Metallica, Foo Fighters o Queens of the Stone Age.
Alborán contra Maluma
En las categorías de música latina hay que consignar la presencia de un único artista español, Pablo Alborán, precedido por sus frustrantes experiencias en los Grammy latinos (que nunca le han otorgado premio alguno pese a haber sido nominado 24 veces). El malagueño se postula para el galardón al mejor álbum latino y no lo va a tener fácil: entre sus rivales figura el colombiano Maluma.
Y en otros ámbitos, buenas expectativas para la banda sonora de ‘Barbie’ (11 nominaciones asociadas a voces como Eilish, Dua Lipa o Nicki Minaj), y algún que otro ilustre veterano infiltrado en premios menores: Bruce Springsteen, optando al ‘mejor álbum vocal pop tradicional’ con su disco de versiones soul ‘Only the strong survive’, y compitiendo con otra voz venerable, Rickie Lee Jones con ‘Pieces of treasure’. Y Joni Mitchell, cuyo milagroso disco en directo aspira al título de mejor álbum folk, y que previsiblemente actuará en el Crypto.com Arena. Ahí se prevé poder ver a figuras de varias generaciones, de Billie Joel a Dua Lipa, pasando por Tracy Chapman o (desde Las Vegas) sus señorías U2.