Tiene el Atlético por delante un calendario exigente como pocos. Con tres competiciones abiertas y un grado de excelencia que solo encontrará con toda la plantilla activa. De ahí que la efervescencia de un hombre como Memphis en el mes de enero está siendo clave para mantener el pulso. El neerlandés, con su acierto en el 90, volvió a rescatar al equipo rojiblanco después de un duro partido frente al Rayo, que consiguió anular el gol de Reinildo con una réplica de Álvaro García. Tras una sequía de nueve partidos seguidos sin marcar, Depay lleva cinco tantos en cinco encuentros. Un delantero ‘oranje’ exprimido al máximo.
Debut de Vermeeren en un Atlético lleno de cambios
Recomiendan los expertos -ese grupo indeterminado que los periodistas utilizan para validar sus artículos- una dieta variada. No importa tanto la cantidad como que las proteínas, las vitaminas y el resto de variedades estén representadas. Lo mismo sucede en las alineaciones de Simeone en una fase de la temporada en la que solo una dieta omnívora le ayudará a estar en puestos de Champions, avanzar en ese torneo, divisar la final de Copa… Y todo ello sin perder la energía acostumbrada. O lo que es lo mismo: sin Griezmann, el hombre franquicia.
Para mantener ese equilibrio, el ‘Cholo’ optó por meter su once en una puerta giratoria de la que salieron como titulares el jovencísimo Vermeeren, que solo duró 45 minutos, y una dupla formada por Memphis y Correa, que cumplió 400 partidos como rojiblanco. Una meta alcanzada después de su frustrada salida a Arabia y el frustrado fichaje de Moise Kean. Tuvo dos grandes oportunidades el argentino en la primera parte para hacerse un regalo por la cifra redonda.
En la primera falló ante Dimitrievski y en la segunda lo hizo en fuera de juego. No encontró el peligro el Atlético de la fluidez de un centro campo que se estaba conociendo, con Vermeeren como volante derecho (la suya fue una toma de contacto). Tuvo más posesión el Rayo para evitar un desastre como el vivido con el 0-7 de la ida. Esto invisibilizó al belga. La magia que necesitaba el encuentro la expresó Pablo Barrios, un canterano que algún día será cabeza de cartel.
Reinildo desatasca, Álvaro García empata
Su ruleta espoleó a los rojiblancos, que encontraron el gol a balón parado, con una falta botada por Riquelme que Reinildo, con un cabezazo picado, ajustó a la madera derecha. El tanto fue validad por el VAR pese al agarrón del mozambiqueño sobre Lejeune. Cuando el Atlético consigue abrir el marcador como local la victoria suele estar servida. Sin embargo, el Rayo, que pese al gol en contra había entendido mejor el contexto del partido, no tardó en empatar con una jugada eléctrica.
Propia de un equipo como el de Francisco, que basa su fortaleza en el orden defensivo, pero que sale como un ciclón. Álvaro García la cruzó con la zurda de modo tan ajustado que se llevó la botella de Oblak. El empate llegó tras una pared excelente de Isi con Chavarría. Nada que ver con la sequía que persigue a la delantera franjirroja. Al Atlético no le bastaban las rotaciones e iba a tener que enriquecer la receta para superar a un Rayo bien plantado.
En el descanso recibió el ‘Profe’ Ortega un homenaje, tanto del público como de los jugadores. El preparador físico uruguayo dirá adiós a final de temporada al proyecto al que ha dedicado los últimos doce años de su vida -con una experiencia con su selección de por medio que minó la relación con Simeone-. Terminó la aventura de Vermeeren y Nahuel entró tras la reanudación.
Memphis se rebela contra el destino del VAR
No funcionaba la maquinaria del Atlético ante un Rayo sólido, donde el ‘Pacha’ Espino frustraba las llegadas de Correa. A Simeone no le quedó más remedio que terminar con las rotaciones antes incluso de la hora de juego. Entraron De Paul, Lino y Griezmann para resolver una papeleta que se ponía complicada.
Es cierto que los visitantes solo salían con Álvaro García y Chavarría -el mejor del Rayo- como argumentos ofensivos, pero el Atlético, en casa, y en estas circunstancias, está obligado a ganar. Solo faltaba Koke para deshacer la idea del ‘plan B’ y así terminó sucediendo. Barrios encontró la llave de la victoria con un maravilloso pase con el que anuló a Aridane.
Pero el VAR sacó milimétricamente adelantado a Memphis, que, lejos de venirse abajo, acabó llevándose otra ración de heroicidad con el 2-1 ganador en una acción en el 90 donde le ganó la partida a los centrales. Protestó el Rayo una falta de Griezmann. Lo hizo con el amargor de una resistencia sin premio que volvió a llevarse el Atlético en su templo.