Les Trois Vallées, formado por ocho estaciones conectadas por una red de 180 modernos remontes mecánicos, es el mayor dominio de esquí del mundo. Situado en pleno corazón de los Alpes franceses de la Saboya, ofrece más de 600 kilómetros sobre una red de más de 1.500 hectáreas de pistas, de las cuales el 85% están por encima de los 1.800 metros. El conjunto del territorio cuenta con un 50% de pistas fáciles (verdes y azules), como las míticas Les Creux en Courchevel o Tête Ronde en Val Thorens, y un 50% de pistas para expertos, como las negras más empinadas de Vertical Xperience en la cima del legendario Saulire o experiencias fuera pista como los clásicos senderos Gebroulaz, Le Borgne, Geffrian y Lac du Lou.
Situado en la cima del dominio esquiable de los 3 Valles está Val Thorens, un complejo que nació en 1969 gracias a la visión del promotor inmobiliario Pierre Schnebelen, quien encontró los fondos y autorizaciones pertinentes para construir la que es la estación más alta de Europa, cuya extensión está situada en un 99% por encima de los 2.000 metros siendo su punto más alto de 3.200 metros. En 1981/1982 se construyó el teleférico de Cime Caron, que llegó a ser el más grande del mundo en su momento y, posteriormente, se fueron realizando mejoras hasta lograr dar forma a uno de los destinos más destacados del continente y, por qué no, del mundo. Prueba de ello es que este destino se ha convertido en ‘la mejor estación de ski del mundo’ en los World Ski Awards de 2023 y ha conseguido hasta en ocho ocasiones coronarse como ‘el Mejor resort de esquí de Europa’ en los European Best Destinations, este 2023 la última vez.
Su área esquiable, situada en el corazón de un gran circo natural dominado por seis glaciares, ofrece multitud de itinerarios, una nieve de gran calidad y remontes de última generación. En total, dispone de 183 pistas azules, 117 rojas y 34 negras repartidas en 150 kilómetros. Pero, la cosa no se queda ahí.
Actividades para todos los gustos
Val Thorens es todo un paraíso de los deportes de invierno. Además de poder practicar esquí o snowboard, este complejo pone a disposición de los visitantes numerosas opciones para pasar un día inolvidable.
Una de las más atractivas es el trineo Cosmojet, que permite vivir una experiencia inolvidable en una pista balizada en el corazón de un valle natural. Con 6 kilómetros es la pista de trineo más larga de Francia. Accesible para todo el público a partir de 5 años, ofrece un recorrido de 45 minutos que combina curvas cerradas y pendientes variadas. El precio es de 19 euros para el descenso, 28 para dos carreras y de 38 euros para todo el día.
Además, se pueden realizar bajadas nocturnas. Pero, hay mucho más. Carving, esquí fuera de pista, boardercross, Telemark, esquí de travesía, snowpark, travesías nocturnas, BTT sobre nieve, conducción sobre hielo, la tirolina La Bee, que desciende por la ladera durante 1.800 metros de altura de vuelo hasta 65 metros o las dos pistas de snowtubing para lanzarse en flotadores gigantes… hay opciones para todos los gustos.
Los más valientes podrán disfrutar de un vuelo en paramotor o parapente sobre Val Thorens y el Valle de Belleville u optar por vuelos panorámicos o deportivos en un helicóptero. Así mismo, también están las opciones de conducir sobre hielo en Saboya en un circuito que ofrece posibilidades reales de deslizamiento y conducción en sus 760 metros de longitud, o la de escalar una cascada de hielo acompañado por profesionales que enseñan a manejar piolets y crampones.
Este es también un parque ideal para los amantes de la montaña ya que ofrece unas vistas excepcionales como las del legendario Glaciar de Péclet o la que es ‘la vista más bella de los Alpes’, según la Guía Verde Michelin, una panorámica de 360 grados de más de 1.000 picos de los Alpes franceses, suizos e italianos desde el Cime de Caron. Además, se puede visitar un pueblo iglú que, con una superficie de 180 metros cuadrados y situado en la pista verde de Combe de Thorens, ofrece desde un campamento base polar, pasando por una azotea y una cúpula geodésica, hasta un restaurante y un bar de hielo.
Este complejo es también un templo gastronómico que cuenta con más de 40 bares y 60 restaurantes que presentan una auténtica experiencia gourmet para satisfacer hasta a los paladares más exigentes, una invitación a la exploración culinaria en las cumbres alpinas.
La temporada en esta estación comenzó el 25 de noviembre y se alargará hasta el 5 de mayo.