El SVI, es decir, el Síndrome Visual Informático, es una enfermedad bastante nueva pero ya tiene nombre, diagnóstico, síntomas y tratamiento. Y causa, claro, que es el incremento de horas que pasamos frente a los dispositivos móviles y que desde que alcanzase máximos en 2020, durante el confinamiento, no ha dejado de crecer.
Esta situación está provocando, según el Consejo General de Colegios Farmacéuticos, un aumento del número de casos de Síndrome Visual Informático (SVI) que se ha mantenido por encima de lo que era habitual.
- Un síndrome que se define como el conjunto de problemas oculares relacionados con el uso continuado de la visión de cerca y con el uso de ordenadores, tablets y smartphones.
Y la doctora María Isabel de Andrés, vocal nacional de Óptica y Acústica del Consejo General de Farmacéuticos, reconoce que este síndrome:
- «Ha sido una de las consultas más habituales en las farmacias españolas desde la pandemia y a lo largo de los últimos años con el incremento en el uso de pantallas de dispositivos móviles».
Síntomas del SVI
El SVI puede afectar al 90% de las personas que hacen uso de dispositivos durante más de 3 horas diarias. Los síntomas que origina a veces desaparecen al cesar la actividad, pero en otras ocasiones permanecen, reduciendo la salud visual del usuario.
¿Y cuáles son esos síntomas? Pues entre los más frecuentes se encuentran:
- Dolor de cabeza, cuello y hombros.
- Mareos.
- Cansancio visual.
- Picor de ojos.
- Sequedad ocular y lagrimeo excesivo. Puede verse muy agravado por la edad, el uso de lentes de contacto y factores como la sequedad ambiental.
- Visión borrosa en distancia próxima.
- Hipersensibilidad a la luz.
- Irritación ocular entre otros.
Las causas más habituales de la aparición del síndrome visual informático son:
- El exceso de acomodación al enfocar un objeto de cerca de forma continuada (por ejemplo, al leer)
- La sequedad ocular, por disminución de la frecuencia de parpadeo
- La radiación que emiten las pantallas de visualización de estos dispositivos, especialmente la luz azul.
Recomendaciones para prevenir el SIV
Aunque afortunadamente desde el final de la pandemia el panorama se hizo más halagüeño, la exposición a las pantallas continúa siendo altísima. Por eso, los farmacéuticos facilitan algunos consejos para prevenir la aparición del síndrome de visual informático.
- Si llevas gafas o lentillas habitualmente, asegúrate de llevar la graduación correcta. Los farmacéuticos recomiendan una visita anual al óptico u optometrista para la realización de un estudio ocular completo.
- En relación con los dispositivos móviles recuerdan que es recomendable usar gafas con filtro antirreflejante y/o para la luz azul de las pantallas LED.
- Cuida la iluminación de tu zona de trabajo. Que no dé la luz directamente sobre los ojos, ni genere sombras o reflejos sobre la pantalla. No trabajar nunca a oscuras, regular la intensidad y el brillo de la pantalla para que no sean excesivos. Activar el filtro de luz azul si la pantalla lo tiene.
- Realiza descansos periódicos utilizando la regla del «20-20-20» (pausas de 20 segundos cada 20 minutos mirando a una distancia de 20 pies (unos 6 metros).
- Mantén una distancia y posición de visualización adecuada en función de cada pantalla.
- No exceder las dos horas de uso.
- En el caso de usar lentes de contacto o en ambientes secos (aire acondicionado, calefacción, viento.) se aconseja utilizar lágrimas artificiales.