Mbappé dinamitó el encuentro frente al Betis con su primer gol en el minuto 67, pero fue apenas siete después cuando los blancos certificaron la victoria desde el punto de penalti. Rui Silva derribó a Vinicius en el área en una acción comentada por todas las partes con diferente criterio. Mientras que para la televisión oficial del Real Madrid fue “un mínimo de justicia” tras otros dos castigos no decretados, Pellegrini fue directo en su análisis: “Se tira”. Hasta un mito como Van Basten se metió en la conversación de la acción en la que Alberola Rojas necesitó el VAR.
Tres penaltis reclamados por el Real Madrid
Pero la primera jugada controvertida fue protestada por el Betis, nada más comenzar el encuentro, cuando Aitor Ruibal presionó a Courtois en la salida de balón. El belga despejó un balón dividido y después pisó de modo involuntario al delantero verdiblanco. No hubo nada punible para Alberola Rojas y tampoco para el videoarbitraje que lideró Muñiz Ruiz. En la segunda mitad, los locales pidieron hasta tres penaltis, pero solo uno fue sancionado.
El más reclamado fue una mano de Llorente dentro del área que el conjunto arbitral del partido no consideró. Fue en el minuto 53 después de un centro que rebotó en la mano del central verdiblanco. Se interpretó falta de voluntariedad en la jugada. Cuatro minutos después Sabaly derribó a Ceballos en el área, lo que encendió al Bernabéu y a los jugadores del Real Madrid. Vinicius vio la amarilla por la intensidad de sus protestas.
La tercera acción controvertida en territorio bético sí fue sancionada, pero después de que Alberola Rojas acudiese al VAR. Ocurrió en el minuto 74. En primera instancia, el colegiado del encuentro decretó fuera de juego de Vinicius, por lo que el derribo de Rui Silva no admitía debate posterior. Sin embargo, el fuera de juego semiautomático, implantado este año en LaLiga, decretó que no había posición antirreglamentaria. El VAR llamó al representante del Comité de Castilla-La Mancha que, a instancias de Muñiz y del resto de miembros del videoarbitraje decretó la pena máxima que acabaría transformando Mbappé después de la cesión del lanzamiento por parte de Vinicius.
La rectificación de Alberola y la crítica de Fornals
Desde la temporada pasada, la Real Federación Española de Fútbol, en busca de la transparencia, publica las conversaciones entre los estamentos arbitrales. “Me parece penalti, Javi (Alberola Rojas). Va a por el balón y le derriba“, le comunicó Muñiz Ruiz a su compañero, una alocución directa que va en contra de lo que se comentó el curso anterior.
En la 2023/2024 la interlocución entre los colegiados pasó de ser imperativa a un consejo, con la fórmula: “Te recomiendo que veas la jugada”. El asistente del videoarbitraje insiste: “Estoy de acuerdo”. “Le dribla y le da ahí”, termina por concluir Alberola Rojas, quien no revisa el órsay de Vinicius, porque el sistema semiautomático dictamina que está en línea. “Le da con la rodilla”, sentencia el árbitro del Real Madrid – Betis antes de decretar la pena máxima.
La lectura de la misma fue muy diferente por parte de Manuel Pellegrini en sala de prensa: “El VAR intervino para un penalti en el que se tira Vinicius cuando el balón se le había ido. Con eso el partido se le puso de cara el partido al Real Madrid. Teníamos tiempo para empatar. En otro encuentro, este mismo colegiado con nosotros fue al VAR a ver un penalti a Assane y estimó que no era. Ahora ha estimado que sí. Ganó el Real Madrid y no hay que darle más vueltas”. El bético Pablo Fornals, muy crítico en zona mixta, apostó por la misma teoría: “Me parece que Vinicius hace por caer, a vosotros, los madridistas, os parecerá lo contrario”.
“Kylian, tú”, la cesión de Vinicius a Mbappé
En la conversación social de la acción entró el neerlandés en la televisión de Países Bajos. “El propio Vinicius le dio una patada en las piernas al portero del Betis, que no hizo nada. ¿Qué tontería hay que tener como VAR para ver esto como penalti? Es un ejemplo típico de que el VAR nunca ha jugado este partido. Si lo hicieras, lo sabrías”, defendió el exdelantero del Milan o Ajax en una reflexión que va en contra del propio modelo.
El tanto de Mbappé desde los once metros fue sanador para el Real Madrid. Permitió ver la complicidad entre Vinicius y el francés con la cesión del lanzamiento de penalti. “Kylian, tú”, dijo el brasileño incluso antes de que Alberola Rojas fuese al VAR, porque estaba convencido de que lo pitaría.
Carvajal, capitán de la nave blanca, le dio un abrazo al brasileño por un gesto que el galo agradeció públicamente después. Los penaltis serán una vía de escape para equilibrar los protagonismos. En Gran Canaria le tocó a Vinicius y en el Bernabéu a Mbappé. El siguiente lo marcará la “libertad” que Ancelotti les ha dado, pero que pasa por un calculado reparto de responsabilidades.