Javi Guerra podría ser jugador del Atlético de Madrid en los próximos días, quizás en las próximas horas. El jugador del Valencia CF está a la espera de que los colchoneros pongan la rúbrica definitiva a una operación en la que ya está todo acordado e incluso los documentos entre todas las partes ya han sido intercambiados.
Los colchoneros están acabando de perfilar sus números para que encaje en el Fair Play Financiero en una semana en la que están realizando un gran número de operaciones tanto de entrada como de salida para acometer una revolución en su plantilla.
En el día de ayer se dio un paso más que sintomático de cara a su salida del club de Mestalla, ya que no entrenó con el resto del grupo por precaución de cara a que no sea un problema físico lo que rompa la operación. El futbolista sí acudió a las instalaciones de la Ciudad Deportiva de Paterna, pero lo hizo para trabajar en el gimnasio en solitario.
El de Gilet, que hace unos meses dijo en rueda de prensa que para irse del Valencia tendrían que «echarle», pondrá rumbo al Civitas Metropolitano si nada se tuerce. Según Tribuna Deportiva, los documentos entre todas las partes han sido intercambiados a fin de cerrar el traspaso del joven valenciano, clave en la permanencia del club en Primera División hace dos campañas y que apuntaba a ser uno de los grandes referentes del valencianismo los próximos años por su arraigo a los colores, su potencial futbolístico y por ser uno de los máximos exponentes de la generación de canteranos de ‘La Quinta del Pipo’ que salvó al equipo del descenso.
El conjunto colchonero, que está trabajando en paralelo otras opciones de su centro del campo como Conor Gallagher —mediocampista del Chelsea FC—, está muy cerca de aprovechar la deriva valencianista y su continuada descapitalización deportiva para firmar a un jugador con un techo muy elevado y que, además, ostenta un gran sentimiento de pertenencia hacia el Valencia CF, pero una vez más la gestión de Meriton Holdings y sus ayudantes privará a Mestalla de ver a uno de los suyos cerca de su apogeo.
Los rojiblancos, además, cerrarán la operación en una cifra alrededor de los 25 millones de euros más variables y bonus futuros, un precio que puede acabar siendo muy reducido para un jugador de su proyección técnica en un mercado como el actual, pero que a día de hoy sí supone una apuesta en las condiciones que saltan a la vista que el jugador atesora.
En caso de consumarse la salida del futbolista valenciano, el centro del campo quedará más debilitado y requerirá de refuerzos en lo que queda de mercado de fichajes.