Hay dos motivos que nos recuerdan el estado de salud en que se encuentran los pies.
- El primero es el dolor ya que cualquier molestia en ellos que nos impida movernos con normalidad nos hace prestarles algo más de atención que habitualmente.
- El otro motivo es el estético, cuando llegan los meses de verano y liberamos los pies de medias, calcetines y zapatillas cerradas y vemos que nuestras uñas no presentan un aspecto excesivamente saludable.
Y es las patologías que afectan a las uñas de los pies son muy frecuentes y de muchos tipos, explica el doctor Juan Jiménez Cauhé, dermatólogo de Clínica FEMM, que, además de las cuestiones estéticas, pueden ser indicativos de otras condiciones de salud que requieren atención especializada.
Estos son los principales problemas que presentan las uñas de los pies
Existe una gran variedad de patologías ungueales y entre las más comunes el especialista en dermatología señala:
El especialista explica que pueden ser tanto benignos como malignos. Sean del tipo que sean lo que está claro es que requieren una evaluación médica especializada.
- Las alteraciones en el color y la superficie de las uñas
Si hablamos de uñas que presentan cambios de color, uñas amarillas o marrones, el dermatólogo señala que estas coloraciones pueden deberse a infecciones causadas por hongos, o provocadas por otros problemas sistémicos.
Otros problemas son las irregularidades en la superficie, como estrías o rugosidades, suelen ser causadas por traumatismos o enfermedades como la psoriasis.
Y, finalmente, el doctor Jiménez Cauhé habla de los traumatismos en las uñas, que abarcan desde golpes hasta uñas encarnadas. muy frecuentes y pueden provocar no solo dolor sino también infecciones en el caso de que no se traten de forma adecuada.
Consejos básicos para cuidar las uñas de los pies durante el verano
Ante esta variedad de problemas que pueden aparecer en las uñas de los pies y, por supuesto, para lucir unas uñas sanas durante este verano, el especialista de la Clínica FEMM facilita una serie de consejos básicos que sirven tanto para prevenir patologías ungueales como para tratarlas en el caso de que aparezcan.
- Higiene adecuada. En una época del año donde los pies están más expuestos, es fundamental lavarlos diariamente con agua y jabón. Tras la limpieza hay que asegurarse que los pies quedan completamente secos, incluidos los espacios interdigitales, para evitar infecciones por hongos.
- Cortar correctamente las uñas. Es importante cortarse las uñas de forma recta y no demasiado cortas para prevenir que se encarnen. Además, los utensilios que utilicemos para ello deben estar afilados y limpios para evitar daños y reducir el riesgo de infecciones.
- Uso de calzado apropiado. El calzado debe ser cómodo y permitir la ventilación adecuada del pie. “Los zapatos demasiado ajustados o de materiales sintéticos pueden favorecer la aparición de hongos y deformidades en las uñas”, advierte el dermatólogo.
- Hidratación. Usar cremas hidratantes específicas para los pies va a permitir que no solo la piel esté en buen estado, sino también va a hidratar las uñas evitando la aparición de grietas.
- Protección en lugares públicos. Es tiempo de piscinas, en para transitar por estos espacios el especialista recomienda el uso de chanclas con el fin de “evitar el contacto directo con superficies potencialmente contaminadas”.
- Deja “respirar” a las uñas. Si utilizas esmalte, el doctor Jiménez Cauhé recomienda “no dejarlo mucho tiempo puesto, especialmente en el caso de las uñas de gel o porcelana: si se retira la cutícula puede aumentar el riesgo de infecciones y patología de las uñas”.
En cualquier caso, si se detecta cualquier alteración estética o dolor en las uñas el doctor recuerda la importancia de acudir a un especialista porque “un diagnóstico preciso y un tratamiento adecuado pueden prevenir complicaciones mayores y asegurar una recuperación eficaz”.
Las opciones de tratamiento varían desde medicación tópica y oral hasta procedimientos quirúrgicos menores, dependiendo de la gravedad y el tipo de patología.