La cantante, que empezó su carrera musical en Mallorca, reconoce que “confiaba mucho” en ganar el premio MTV de los European Music Awards en una categoría, la de mejor artista español, en la que también concurrían Lola Índigo, Quevedo, Abraham Mateo y Álvaro de Luna
¿Sigue de fiesta?
Me pillas en mi restaurante favorito de Madrid con mi repre Gema almorzando como dos campeonas. Con nuestros platos favoritos pero en total soledad. La jefa de comunicación, la mejor de este país, y la artista en cuestión nos merecemos un capricho.
¿Ha podido dormir?
Me acosté tardé. ¡Vaya frenesí! Pero pude dormir, tengo la suerte de seguir manteniendo todas las cualidades de cuando era un bebé.
¿Qué se siente con una corona tan codiciada como la de MTV?
Confiaba mucho en mí misma. Ha sido una victoria tan dulce… y sobre todo que haya tanta gente enfadada de que yo haya ganado. Generar esa reacción me provoca tanta satisfacción…
¿Siempre ha sabido que el suyo era el camino correcto?
También confío mucho en la duda. Respetarse a una misma también es concederse un margen de error y entender que no siempre vas a alcanzar la excelencia, o que puedes fallar y pasar momentos difíciles. No hay que juzgarse de una manera contundente en esas situaciones. A veces me pregunto si realmente soy tan buena como yo pienso. ¿Pero realmente sería tan terrible no ser tan buenos como nos pensamos? Gracias a esa reflexión siempre dejo detrás la ansiedad y sigo recorriendo camino, a veces bien, otras mal, pero siempre confiando en mí misma.
Creció viendo la MTV en Magaluf.
Sí, me despertaba muy pronto para ir al instituto y siempre veía los videoclips que ponían en la cadena. Ese era mi momento favorito del día, desayunar con lo más indie, lo más underground.
“Mi momento favorito del día era desayunar con los vídeos de la MTV, lo más indie, lo más underground”
¿Quiénes fueron sus primeras heroínas?
Para mí la persona referencia en la música y sobre todo en el concepto de arte siempre fue Lady Gaga.
Si usted no fuera Samantha Hudson y tuviera hijos, ¿dejaría a sus hijos salir con Samantha Hudson?
Obviamente. Contra todo pronóstico yo soy una persona muy de familia y muy de mamás y papás. Me llegan millones de mensajes dicéndome: «mi padre es súper fan tuyo» o «a mi abuela le encantas». Sé que tengo una imagen muy de inframundo, para mucha gente soy el anticristo, pero nada más lejos de la realidad. Yo sería la mejor amiga de cualquier hijo o hija.
En su discurso de agradecimiento ha saludado a sus «minorías». ¿Quiénes son?
Las disidencias, las neurodivergentes, la gente racializada que sigue mi trabajo, las personas queer… En general es una manera divertida, un poco irónica, de apelar a ese público que todavía arde en deseos de ver una representación fidedigna de la diversidad que hay en calle y en nuestro día a día. Una diversidad cultural, étnica, de género, de cuestión de orientación sexual… Unas minorías que conforman una parte indispensable de mi público.
El premio coincide con la publicación de nuevo disco, ¿qué sonido define a ‘AOVE Black Label’.
Es un sonido más evolucionado, mucho más profesional, mejor realizado en cuestiones técnicas y prácticas, y sobre todo es un cambio de estética. Ahora es mucho más electrónico, mucho más raver, todo música máquina, la cultura del club, el parkineo… Es mi época más raverita.
“Mi sonido ahora es mucho más electrónico, mucho más raver, todo música máquina, la cultura del club, el parkineo…”
¿Su única adicción es sonora?
El sonido, descansar bien, nutrirme con la comida y hacer ejercicio, porque sino no hay quien aguante este ritmo frenético.
Lola Índigo, Quevedo, Abraham Mateo y Álvaro de Luna, sus rivales. ¿Ya le felicitaron?
De momento no he recibido noticias pero estoy convencida de que seguro que les hace la misma ilusión que a mí.
La gran vencedora de esta edición ha sido Taylor Swift.
A mí Taylor Swift me cae muy bien. Es de las pocas artistas que se posiciona públicamente sobre asuntos controvertidos y nada populares. Ha ido en contra de hombres poderosísimos de la industria, y me parece estupendo que haya sobrevivido a todas las campañas de cancelación que se ha comido a lo largo de estos años con la polémica de Kanye West, que haya reeditado todo su repertorio porque no tenía los derechos de las canciones y que esté haciendo esta gira tan exitosa.
¿Detrás del fenómeno Samantha también hay un ejército de marketing?
En absoluto. Al contrario que mis contrincantes en estos premios no dispongo de un departamento entero de comunicación y prensa. Somos Gema y yo, con el respaldo de la discográfica, Subterfuge, que no deja de ser un sello de música independiente. De ahí mi sorpresa. Haciendo la comparativa de los recursos de unos, la cantidad de seguidores que tienen, y yo, que no dejo de ser una embajadora de lo underground en el mainstream, pues haber ganado esto es bastante heavy.
Los movimientos pélvicos de Elvis son una broma ante sus ejercicios contorsionistas.
(Risas). Aunque no lo parezca yo le pongo mucho empeño a los conciertos, a la música y en seguir evolucionando mi propuesta. Confío mucho en mis canciones pero sobre todo creo que soy un animal escénico. El directo es mi terreno natural.
¿La provocación es parte fundamental de cualquier arte?
Yo creo que la diversión del arte viene por la provocación que suscita pero también creo que hace falta ser muy artista para lidiar con la controversia y la polémica. Saber desenvolverme por esos terrenos tan pantanosos y salir airosa en la mayoría de ocasiones, creo que ese es mi verdadero talento.
“Lo de «no hay un puto taxi» es muy Mallorca, pero también es muy Madrid, muy Barcelona… Aunque parezca algo muy específico es un sentimiento universal”
En una de sus nuevas canciones, ‘Otra vez’, canta: «No hay un taxi, no hay un puto taxi, en esta ciudad no hay un puto taxi». ¿La escribió estando en Mallorca?
Lo de «no hay un puto taxi» es muy Mallorca, pero también es muy Madrid, muy Barcelona… Aunque parezca algo muy específico es un sentimiento universal.
En las fechas de su gira no aparece Mallorca.
Pues ese es un problema al que hay que ponerle remedio más pronto que tarde. Yo siempre deseo volver al sitio que me vio crecer y cantarle a los míos. A Mallorca no le reprocho nada aunque es cierto que cuesta ser profeta en tu tierra. Pero también creo que todas esas asperezas ya han sido limadas y nos hemos reconciliado.
¿Por qué cambió Mallorca por Madrid, su actual residencia?
Por más alternativas laborales, por ese ansia de comerte el mundo en una gran urbe.
Quien ha vuelto a Mallorca es Valtònyc, para algunos un terrorista con micrófono.
Creo que se usa mucho el término terrorista, y bastante a la ligera.
«Podría ser ministra, en cambio decidí dedicarme a servir; looks, carisma y pussy clean», entona en otro de sus temas. ¿En qué ministerio entraría?
En el de Sexo y rock’n’roll.
Su meada en la Constitución ha desatado una oleada de comentarios en las redes sociales. ¿Se reafirma en su chorreo?
No soy anticonstitucional. Creo que mucha gente que alardea de la Constitución sí que lo es. También me gustaría que se pusiera el foco ahí.
¿Actuaría en un palacio, digamos que en el de la Zarzuela?
Deberíamos preguntarle a ellos si contratarían a Samantha Hudson.
¿Y si se lo propusieran?
Aceptaría, pero dependiendo de un mail explicando en qué consiste el evento y de una buena cantidad de ceros.