Recién nacionalizado en 2022, Thierry Ndikumwenayo llegó mucho antes a España, en 2016, como uno de tantos descubrimientos de Pepe Ortuño, que le acogió en el Playas de Castellón. El atleta nacido en Burundi debutará con la selección española en los Juegos Olímpicos de París 2024,en el 5.000 y en el 10.000. En la primera distancia en el pasado Europeo de Roma solo pudo ser quinto pese a que llegaba con la mejor marca continental del año. Entre 27 participantes, el pequeño atleta nacido en Burundi y residente en Castellón, donde entrena desde 2020 con Pepe Ortuño, no supo cómo dominarla a un ritmo demasiado cómodo para la mayoría. Unos días antes, en los prestigiosos Bislett Games de Oslo, acabó cuarto con 12:48.10, que le situaba como líder europeo del año, mejorando su MMP en casi ocho segundos (tenía 12:55.47), y con solo el sancionado Mo Katir por delante en el ranking continental de todos los tiempos.
Días después en Roma pudo desquitarse en el 10.000, al que llegaba dos semanas después de volar en solitario en Gaetà Huguet para lograr la cuarta mejor marca española de todos los tiempos, con 27:26.52. Pasó dos noches horribles tras el 5.000. «No podía dormir», se lamentaba. En cambio, de la final de 10.000 que ganó el suizo Dominic Lobalu salió con una medalla de bronce tras cruzar la meta con 28:00.96 Hizo caso omiso a los consejos. «Yo no pensaba ponerme a tirar porque con eso solo consigues hacerle de liebre a los demás, a los que tienen buena marca, y que te ganen al final», decía el pupilo de Pepe Ortuño en el Facsa Playas de Castellón, que superó en el esprint al sueco Almgren, favorito al oro.
En los Juegos tiene muy claro que quiere repetir las sensaciones de Roma. «La medalla de Roma es una ilusión para conseguir otra en los Juegos. El objetivo es París, nos vamos a por todo», sentenció el ‘Tigre’, mostrando un peluche representando el animal con el que se identifica Ndikumwenayo desde que se le ocurrió un día ponerse dicho mote.
Concentración en altitud
Ndkikumwenayo llega a París tras concentrarse en la altitud de Font Romeu, en los Pirineos franceses, y pasar antes por La Nucía, donde redondeó un mes de junio inolvidable con el título de 5.000, que ganó con una superioridad aplastante. Lideró la prueba junto con Adel Mechaal, que siempre fue a su rebufo, pero a falta de media vuelta cambió el ritmo y comenzó a abrir distancia sin que el catalán tuviera fuerzas para seguirlo. Entró en meta con un tiempo de 13:20.81 por los 13:24.52 de Mechaal. Tercero, con el bronce, se alzó Eduardo Menacho, que registró 13:37.45. n