En 2022 Maldita Nerea sorprendieron a sus seguidores con el lanzamiento de su nuevo sencillo: La increíble historia entre tú y yo, que ahora aparece como remix. Tomó forma después del atropello sufrido por Jorge Ruiz (líder del grupo, que no parece tener límites a la hora de reinventarse), que le cambió la manera de ver las cosas. En sus redes, Maldita Nerea presentaban ese lanzamiento, tras Un planeta llamado Nosotros, como “un nuevo rumbo“, y es lo que ha sucedido un año más tarde.
Inevitable, el nuevo himno de Maldita Nerea y último avance de Manual para seres maravillosos, su reciente álbum de estudio (se publica el 3 de noviembre), empieza con una conversación en la que se preguntan: “Es como una adivinanza o algo así ¿no?”. Y la respuesta la canta Jorge con una niña de 6 años cuya voz no deja indiferente. Supone además un nuevo giro en la singular trayectoria de la banda. El álbum contiene 11 canciones (10 originales +1 bonus track), que vuelven a traer el inconfundible sonido de este singular proyecto musical.
Inevitable no es la única joya de Manual para seres maravillosos. Canciones como Madre o Duele son propuestas de una tremenda personalidad, lírica y musicalmente hablando. Producido casi en su totalidad por Miguel Lamas. mezclado y masterizado por Caco Refojo en los míticos estudios Montepríncipe, camina sobre un eje fundamental: el amor , y supone un claro punto de inflexión. Cada una de sus canciones va asociada a un concepto, y cada concepto viene representado por un personaje. Las ilustraciones de cada canción corren a cargo del artista Oscar Perales, (Oyeme! Estudio), y hacen que el disco conforme un fascinante y singular catálogo de seres maravillosos que orbitan en torno a la omnipresente tortuga, el símbolo de la banda.
La gira por todo el país arranca el 19 de noviembre en Bilbao, e incluye el Wizink Center de Madrid en febrero, pero antes Maldita Nerea hacen gira de firma de discos.
¿Qué propone Manual para seres maravillosos? ¿Cuáles son las características de este nuevo álbum?
Recordar a todo el mundo que la más maravillosa y pura variable es el amor, y ese es el camino. Soy bastante poco original, lo sé, pero eso es lo que propongo. Es un álbum diferente a todos por varios motivos. La característica principal sería que casi me rompo en el intento, pero conseguí terminar el disco, y estoy muy orgulloso de eso.
Tus temas respiran positividad. ¿Cómo se consiguen esas canciones que levantan el ánimo?
No sé si mis canciones respiran positividad o no, pero yo tengo la intención siempre de que el otro, la persona que escucha, se sienta bien. Yo creo que eso, en la mayoría de ocasiones, desprendo, que no es poco.
¿En qué te has inspirado para componer?
La inspiración para estas canciones ha venido de los últimos tres años, han pasado demasiadas cosas en la vida de todos, y yo no me estaba dando cuenta de que estaba mudando de piel, y estas canciones recogen esa muda de piel.
“La característica principal del disco sería que casi me rompo en el intento, pero conseguí terminar el disco, y estoy muy orgulloso”
Cada una de las 10 canciones va asociada a un concepto, y cada concepto viene representado por un personaje. ¿Sólo lo entiendes si lo puedes sentir?
Es lo que trato de decir con esa frase. Estamos demasiado en entender las cosas, nos olvidamos de sentirlas, y el amor en concreto no es tan sencillo de explicar. Por eso, cantado en la voz de un niño, solo lo entiendes si lo puedes sentir; es difícil que esa frase no te toque, y luego, sí, cada canción va asociada a un concepto y cada concepto a un personaje, por eso esos nombres: Duele, Lágrimas, Madre, y esos personajes que ha hecho Oscar, que ha sido una sorpresa maravillosa en este disco. Es en sí una obra de arte, y lo puedo decir porque es un crack, un gran artista, y lo ha demostrado con las 10 ilustraciones que adornan y configuran este disco.
En tus letras están muy presentes la filosofía y la invitación a la reflexión. ¿Hablamos demasiado y escuchamos poco?
Hablamos mucho, demasiado, yo el primero me incluyo ahí. Eso hace que nos cueste mucho escuchar, porque somos también adiestrados para eso. No es que esté echando balones fuera, pero la escucha no es algo en lo que nos enfoquemos a la hora de educar a nuestros hijos, a las generaciones que vienen, y esto marca un devenir. Siendo el cerebro una máquina increíble de gestionar estímulos, de escuchar, de mirar, de recibir estímulos del exterior, nos cuesta muchísimo pararnos a escucharlos.
Elegir single no es tarea fácil. Cada artista tiene su método ¿cuál es el de Maldita Nerea?
Efectivamente, elegir un single es algo complejo, y lo más habitual es errar. Yo siempre he seguido un método que es la intuición, y me he equivocado mucho, pero también he tenido grandes aciertos. En este disco además estaba bastante claro por parte del equipo y por mi parte que la apuesta más grande era Inevitable. Eso también marca completamente el recorrido del disco, porque no es habitual hacer una canción con niños que habla directamente mirando a los ojos a la infancia, y con una niña de 6 años completamente desconocida. Esto es una cosa bastante arriesgada, aunque hay gente que no lo ve así.
¿Qué se intenta contar con las ilustraciones?
Habría que preguntarle al propio Oscar Perales, que ha tenido completa autonomía para hacer lo que quisiera. Simplemente nosotros le dábamos nuestro feedback, pero es como a mí me gusta trabajar con el equipo con el que esté, sobre todo si hay artistas: “Esto es lo que yo te transmito, pero necesito que crees con toda libertad”. Oscar ha hecho un trabajo espectacular. Yo solo le daba muchas veces el concepto, ni siquiera la canción, y ha habido una afinidad sorprendente, porque es una persona que hemos conocido hace relativamente poco. Esa es la magia que tiene el arte. Estas canciones venían asociadas a conceptos muy grandes, como madre, lágrimas… Él las ha interpretado a su manera. La ilustración que ves de Madre, que el concepto que lleva es el silencio, es completamente suya y libre, y yo me veo reflejado en lo que ha hecho, así que es una suerte haber contado con él y con su trabajo. Es que es una joya. Todas las ilustraciones, y el arte, la portada de este disco. Una auténtica joya artística.
¿Reinvención o actualización? ¿Tus discos parten de cero? ¿Para sobrevivir buscas los peligros?
Al final, una actualización de las grandes, como la que he tenido yo, es una reinvención en sí misma. Este disco, yo siento que lo he hecho desde otro lugar muy distinto a los anteriores, por eso digo que siento que es un cambio de piel, pero eso, siendo justos, se verá con el tiempo. Sí que he aprendido muchísimo sobre el proceso creativo, porque me ha costado especialmente acabar cada canción, y ahora lo veo desde otro lugar diferente a los discos anteriores, no te sabría explicar bien por qué. Yo creo que las palabras no le harían justicia a lo que siento ahora cuando me enfrento a contar lo que siento en una canción, y no es que busque los peligros para sobrevivir, pero la creatividad vive muy cerca del riesgo, y es importante este ingrediente a la hora de crear algo completamente novedoso para ti, y si lo es para ti, es probable que la audiencia lo perciba así. Al menos es como yo lo entiendo.
Inevitable es el nuevo himno de Maldita Nerea. ¿Supone algún tipo de giro en tu trayectoria?
Es la bandera de esta nueva etapa, porque es la primera vez que directamente les hablo con toda la intención a los niños. Cuando digo ‘niños’ es cronológicamente hablando, pero también simbólicamente. Me refiero al niño interior que todos llevamos dentro. Yo canto esta canción con voz de adulto, pero realmente siento que es mi niño, mi “principito”, el que está comunicándose con el mundo, y por eso hemos hecho una acción para los colegios, porque queremos que esta canción sea cantada por muchos niños, y que se les grabe, como a mí se me grabaron esas canciones infantiles, como a todos los niños se les han grabado alguna vez. Mi definición de cómo yo entiendo el amor (“la más valiosa, clara y pura variable, lo que remedia todo lo irremediable, la energía que me lleva hacia ti”) se expresa claramente en estos versos. Poco más puedo decir. Es un giro en nuestra trayectoria, porque no se escuchan demasiadas canciones hechas para niños; para niños pequeños sí, obviamente, pero para Primaria, que es donde principalmente va dirigida esta canción, no hay, como dicen en mi compañía, mucho mercado, y es un riesgo. Soy consciente de ello, y me tiro a la piscina con todo.
“Para Primaria, que es donde principalmente va dirigida esta canción, no hay mucho mercado, y es un riesgo. Soy consciente de ello, y me tiro a la piscina con todo”
La canción empieza con una conversación en la que se pregunta: “Es como una adivinanza o algo así ¿no?”. Y la respuesta la cantas con una niña de 6 años que aparece en el ‘videolyrics’ de Inevitable, pero de la que en ningún momento se ve el rostro. ¿Tratas de preservar su intimidad? ¿Es una de tus hijas?
Sí. Lo de que sea mi hija pequeña no lo busqué. De casualidad cantó la canción y me quedé directamente prendado porque no sabía que cantaba así (de hecho también participa otro hijo mío, un poco más mayor, pero la forma en que la canta, ese desparpajo, esa energía, no me lo esperaba). Lo que sí que tenía claro es que no quería exponerla, quería preservar su identidad. Me parece importante que los menores preserven su identidad. Por eso también hemos puesto un filtro para las redes sociales, para instagram y tic-toc, para que todo aquel que quiera cantar la canción sin mostrarse pueda hacerlo con el filtro y se divierta cantando la canción con total anonimato.
Maldita Nerea es un proyecto personal tuyo. ¿El hecho de usar el formato grupo es una manera de preservar tu anonimato? ¿Qué opinas sobre la fama y el derecho a la intimidad?
Maldita Nerea es un proyecto personal de vida. Empezó siendo una banda, pero acabó siendo un equipo del cual soy el padre, el capitán, pero no voy a ningún sitio sin un equipo; eso lo tengo claro desde el principio. Lo que realmente ha preservado mi intimidad es el hecho de usar la tortuga y no mi cara a lo largo del tiempo. Es más reconocible la tortuga que mi rostro, y eso hace que sea una persona prácticamente anónima, aunque la gente no me cree, pero es real. Yo llevo una vida completamente normal, y eso también hace que en cada disco tenga que empezar de cero. Es un proyecto muy extraño en la música española a todos los niveles, también al de marketing, porque tienes que empezar de cero prácticamente en cada disco, y en este aún más, porque la industria en 3 años ha cambiado una barbaridad.
¿Cómo has desarrollado el proceso de composición? Creo que se ha retrasado un poco el lanzamiento.
Ha sido bastante complejo. Me atrevería a decir que el más difícil de mi carrera.
¿Cuáles son tus retos con las canciones?
Hasta La increíble historia entre tú y yo (2022), las canciones siguientes me costó sacarlas más, bastante, pero ahí apareció el batería que las grabó, Miguel Lamas. Estábamos grabando Inevitable, yo no estaba contento con el arreglo, y él propuso encargarse de la producción. Le dije que sí, porque necesitaba a alguien que me ayudara. Ya lo conocía y me llevaba bien con él, pero es que es casi un hermano para mí, y tiene un talento salvaje. Es conocido como uno de los grandes baterías que hay en España; trabaja no solo aquí, sino a nivel internacional también, pero la mayoría de la gente no sabe que es un bajista excelente. Siempre bromeo con él diciéndole que es un bajista encubierto, pero además produce muy bien. Ha producido discos de otros artistas de otros géneros, y sus propios discos, pero un disco de pop así, no, y la verdad es que yo estoy muy orgulloso de lo que ha hecho. Me he entendido con él a la perfección, trabajamos el arte, la música, desde el mismo prisma, desde dejar que la música y las cosas nos sorprendan, y tratar de no controlarlas. Somos un gran equipo, y se ha notado. Este disco no se puede entender sin la energía no solo de su batería, sino del resto de instrumentos; ha metido teclados, guitarras, incluso coros, y por supuesto todos los bajos. Es una bendición lo que ha hecho a partir de Inimitable.
¿El retraso ha perjudicado vuestra presencia en festivales este verano?
Claro, el hecho de que estuviera componiendo hacía que no tuviéramos la agenda completamente libre. Sí que teníamos unos festivales marcados, y estos los hemos hecho, y a partir de la salida del disco es cuando empieza directamente la gira. Hemos hecho bastantes recintos, pero a medio gas. La gira empieza ahora, a ver si no vuelve a ser interrumpida como la anterior por una pandemia mundial.
¿Sigues confiando en el formato disco? Parece que las estrategias de muchos músicos, especialmente los que están ligados al mainstream, apuntan a la publicación de singles.
Aún hay mercado de venta de disco físico en formato CD y vinilo, que se ha reactivado, pero en el caso de un disco como el nuestro, sobre todo por el tema de que sea ilustrado, sí creo que procede esa obra de arte física más allá del CD o vinilo en sí. Se siguen vendiendo discos, muchísimos menos, aunque de forma masiva se consume a través de las plataformas digitales en los dispositivos móviles, pero ahora también es muy normal publicar un single aislado. Yo no me cierro a hacerlo, porque además, como he cambiado la manera de entender la composición, para mí ahora es mucho más abierta que antes, y puedo hacer la canción que me cambia la vida en cualquier momento. Esto es así, puede suceder todavía. Para esto el formato single es ideal.
“Un disco como el nuestro, sobre todo por el tema de que sea ilustrado, sí creo que procede esa obra de arte física más allá del CD o vinilo en sí”
¿Tienes la sensación de ir un poco por libre en esta vorágine de la industria, o te adaptas al momento? ¿Cómo consigue uno mantenerse al margen de las exigencias del mercado y las discográficas?
Yo soy en ese sentido bastante murciano. Siempre he ido muy por libre y sigo haciéndolo, aunque trabaje con una multinacional, pero siempre tienes la obligación de adaptarte, porque, como todo ser vivo, si no te adaptas, no sobrevives, y en este entorno de la música, que en los últimos años ha cambiado mucho más rápido, a la tortuga le cuesta, pero trata de hacerlo, y eso es lo que te mantienen vivo e ilusionado: cómo me puedo adaptar, cómo puedo hacer canciones que sigan interesando a mi audiencia y a las generaciones que vienen. Seguimos muy vivos. Vamos a estrenar este disco en el Wizink Center, y espero que se llene como la última vez. Luego que la vida me lleve por donde ella diga; obviamente no lo voy a controlar, pero nosotros vamos a por todas.
Una vez me dijiste que fuiste a visitar a las cadenas de radiofórmula para ver por qué no ponían tu música. ¿Qué averiguaste?
Esto sucedió en 2009, justo antes de que empezáramos a sonar. Uno de mis sueños de pequeño era que mis canciones sonaran en la radio, y como no lo conseguía, pedía a los equipos ir yo a preguntar qué estaba haciendo mal. No fui a decir ‘por qué no me ponéis’, sino ‘por qué no lo estoy consiguiendo’, y ahora creo que voy a tener que volver a hacerlo, porque yo quiero sonar en la radio, siempre ha sido mi intención, y sigo creyendo en el formato radio, aunque ahora un artista puede mantener una carrera completamente independiente sin haber sonado ni una vez en la radio; de hecho es lo más frecuente, pero a mí me hace ilusión, sigue siendo un formato para mí superimportante, y hacer esta entrevista para mí lo es, y algo estoy haciendo mal si no consigo que mis canciones lleguen a la radio.
Madre termina con la frase ‘era un beso, una canción de cuna’. ¿Cómo defines el amor maternal?
Es una de las canciones más importantes del disco. No pensaba escribir nada sobre la maternidad o la figura de la madre, y sin embargo sucedió. Miguel se identificó con ella desde que tuve la letra. Escribí en el disco sobre Madre: “Ella es siempre el principio, el beso, la canción de cuna. Nuestro origen está muy vinculado al silencio desde el vientre materno; de él venimos. A él podemos volver. Desde el amor nada se pierde”. Procedemos de ese silencio del vientre materno, y curiosamente encontramos a menudo la paz en el silencio. Este concepto de volver al origen, a la matriz, a través del silencio, me ha transformado mucho en la composición de este disco, y por eso esta canción es importante para mí.
Hay otra canción en el disco, Te prometo libertad, de la que presentas una ‘children’s version’. ¿Cuál es su mensaje?
Hemos incluido un bonus track que es Te prometo libertad, esta vez cantada por una niña de la que soy mentor: Inés Domínguez. Yo participo un poquito cantando con ella. Es uno de los temas que quiero que formen parte de un proyecto educativo que tengo. Ya estaba en el disco Un planeta llamado nosotros. Fue un encargo del pedagogo Francesco Tonucci, que viene a decir que para que los niños sean libres tenemos que dejarlos ser. Ese concepto parece muy de sentido común. Desgraciadamente, por el ritmo de vida que llevamos, no dejamos espacio para nuestra propia libertad y para la libertad de los niños. Vivimos en una sociedad muy polarizada, y la música puede jugar un papel determinante a la hora de rebajar esa polarización, en la que juega un papel protagonista la velocidad a la que vivimos, que es contraintuitiva, y también las ideologías, cada vez más vacías, carentes de sentido. La música está aparte, es sagrada, y los músicos tenemos la oportunidad de transmitirle a todo el mundo cosas positivas, valores eternos, y en eso estamos.
Nuevo disco, y nueva gira. ¿Incluyes Latinoamérica o lo dejas para más adelante?
Esa es la idea. Cerrar la gira en España y encontrar huecos para volver a Latinoamérica, que lo dejamos a mitad porque se interrumpió por la pandemia la anterior gira, y ahora lo que quiero es retomarlo. Ojalá. Voy a hacer todo lo posible, y además hay muchos países que no he visitado: Chile, Argentina, Colombia, Perú… Quiero estar allí; a ver si lo consigo.
¿Qué quieres ser de mayor?
Me encantaría seguir siendo tortuga, solo eso. Significará un montón de cosas.