Los Memphis Grizzlies retiraron este sábado a lo más alto del FedEx Forum y para la eternidad el dorsal ’33’ que defendió durante 11 temporadas Marc Gasol, el mejor jugador de su historia.
Gasol quiso un homenaje compartido con sus amigos y excompañeros en los Grizzlies Mike Conley, Tony Allen y Zach Randolph, que marcaron una era con la joven franquicia y se les conoció como ‘Core 4’.
Conley, Allen, Randolph y Gasol saltaron juntos a la pista cuando finalizó un partido entre los Grizzlies y los Philadelphia 76ers de la temporada regular de la NBA y se sentaron uno al lado del otro en el centro del parqué para recordar los viejos tiempos.
“No me lo habría perdido por nada del mundo”, aseguró Conley, el único que sigue en activo y que el viernes jugó un partido con sus Minnesota Timberwolves en Phoenix.
Fue un equipo célebre por su dureza defensiva que jugó al ‘grit and grind’ (algo así como ‘apretar los dientes y triturar’), una manera de entender el baloncesto y la vida que se convirtió en identidad de la franquicia y de la ciudad.
Los aficionados que acudieron hoy al pabellón no solo sacaron del armario las camisetas antiguas de Gasol, sino que desempolvaron banderolas y carteles de la época más gloriosa del ‘grit and grind’.
El ’33’ de Gasol se unió en el techo del FedEx Forum de Memphis al ’50’ de Randolph, que fue retirado en diciembre de 2021. Los Grizzlies quisieron esperar a que Gasol dejase el baloncesto para colgar su ’33’, un paso que dio en enero pasado tras sus últimas dos campañas en el Girona.
A la ceremonia acudió la familia Gasol al completo, también su hermano mayor, Pau, que jugó para los Grizzlies siete temporadas antes de que los de Memphis lo traspasaran a Los Angeles Lakers a cambio de los derechos de Marc.
Entre los dos pusieron el apellido “Gasol” en Memphis durante 18 campañas seguidas, una auténtica dinastía en una ciudad que se convirtió en su casa.
Un Marc Gasol visiblemente emocionado tomó el micrófono y, con su esposa e hijas al lado, se dirigió a los aficionados de Memphis, muchos con la camiseta con su nombre, para agradecerles “el amor constante” recibido por la ciudad.
Gasol les prometió que incluso cuando dejó la franquicia en 2019 para ir a los Toronto Raptors y ganar su único anillo, se llevó con él a los Grizzlies.
Para probarlo enseñó el anillo de la NBA que ganó en Toronto, que en su interior tiene grabado ese lema de Memphis del ‘grit and grind’.
“Cuando logré lo más grande que hay en el baloncesto, que es ganar un anillo de la NBA, ahí estaban estos tipos que tanto significan para mí“, afirmó Marc, hablando de Allen, Conley y Randolph, ante la explosión del FedEx Forum.
Todo el mundo en Memphis parece recordar esa temporada 2012-2013, en la que los Grizzlies del ‘grit and grind’ más cerca estuvieron del anillo, llegando a la Final de la Conferencia Oeste. Ese año la NBA seleccionó a Marc como el Mejor Defensa de la liga.
Después de reproducir un emotivo vídeo de cinco minutos en las pantallas del pabellón y que Gasol se dirigiese a los fans, la ceremonia entró en su momento cúspide.
Con humo, música y fuego, un gigantesco dorsal con el ‘Gasol 33’ apareció en la pista junto al jugador y empezó a alzarse hacia el techo ante la mirada del pívot de Sant Boi de Llobregat. Fue el momento que todo el mundo que había ido al partido para recordar tiempos pasados y mejores se había quedado esperando.
A partir de este 6 de abril de 2024, nadie más en la historia de los Grizzlies podrá lucir el ’33’, que desde hoy pertenece, para siempre, a Marc Gasol.