Carlos Sainz ha firmado su mejor inicio de temporada en diez años, a pesar de la inoportuna apendicitis que le impidió disputar el GP de Arabia. Tras su podio en la carrera inaugural de Bahrein (3º) y su espectacular victoria en Australia, el madrileño podría incluso liderar el Mundial de haber puntuado en las tres carreras disputadas. Todo ello le ha situado en la órbita de los mejores equipos y Carlos espera aprovechar la oportunidad para asegurarse el mejor asiento posible de cara a 2025, cuando Lewis Hamilton le sustituirá en Ferrari.
El madrileño ha negociado con varias escuderías, principalmente Mercedes, Red Bull y Sauber (que en 2026 será Audi) y quiere cerrar su futuro para poder centrarse al cien por cien en el actual campeonato: “Estoy hablando con algunos equipos porque eso es lo lógico mientras no tenga trabajo para el próximo año: hablar con casi todos ellos. Es sólo cuestión de entrar en más detalles y ver las opciones más realistas, cuáles son las mejores opciones para mí y mi futuro. De momento no tengo ninguna noticia que dar aquí”, ha asegurado Sainz en la rueda de prensa previa al GP de Japón.
Sin embargo, mientras que a principio de temporada Carlos advirtió que se lo tomaría “con calma” para tratar de analizar cada una de las opciones y mirar cuál de ellas era “la mejor a corto y medio plazo”, ahora ha cambiado su discurso y reconoce que “ha llegado el momento de acelerar todo y, con suerte, podremos solucionarlo lo antes posible”.
Las expectativas para Japón
Después de su éxito en Australia, donde adelantó a Max Verstappen antes de que el neerlandés tuviera problemas de fiabilidad con su Red Bull y terminase abandonando, Sainz siente que por fin puede plantar cara con un Ferrari poderoso y al que se ha adaptado de maravilla. Celebra el salto cualitativo del SF-24, aunque asume que todavía no está por delante del RB20 de Max y Checo Pérez.
“En Australia éramos muy fuertes, pero hay que tener la media de las primeras carreras y de media aún estamos a un par de décimas de Red Bull. El trabajo del equipo es extremadamente bueno, el coche de este año es un gran paso adelante”, opina.
“Si miras la última carrera sí parece que Ferrari puede luchar contra Red Bull. Pero en las dos primeras nos metieron 20 segundos, una distancia de ‘pit-stop’, y quizás en Japón vuelva a ocurrir. Si queremos luchar por el título no puede haber circuitos en los que nos superen por esos 20 segundos”, subraya Carlos, exigente.
“Es importante pasar página rápidamente, tanto en lo bueno como en lo malo. Obviamente, cuando vienes de un buen resultado es más difícil porque te gusta disfrutar de ese momento. Pero creo que Suzuka va a ser un circuito complicado para nosotros en comparación con Red Bull. El año pasado ya lo fue, estábamos a ocho décimas hace sólo cinco meses”, ha recordado.
“A ver si este año podemos estar más cerca y disfrutar de esta pista más, porque es una de mis favoritas. Que sea tan estrecho, hace que sea más complicado. Si te sales, tienes grava o hierba, la sensación de velocidad que hay aquí diría que se acerca a Imola. Eso es lo que hace que el piloto sienta esa emoción”, apunta.
Después de su operación de apendicitis en Arabia y su recuperación express, Sainz completó un fin de semana heroico en Melbourne. Ahora llega a Suzuka pletórico de fuerzas: “Este fin de semana estaré al cien por cien dentro del coche. Fuera todavía no levanto mucho peso, pero sí he vuelto a la bici y al gimnasio”, ha explicado.
En cuanto a las evoluciones que introducirá Ferrari en las próximas semanas, Carlos explica que “para Japón no hay grandes mejoras, solo un pequeño cambio en el tren trasero, pero más adelante en la temporada sí llegarán novedades. Con las mejoras que traemos, el coche es un paso hacia delante, pero necesitamos más de lo mismo si queremos luchar por victorias en pistas como Suzuka”.