Vinicius volvió a ser el gran protagonista de una noche de fútbol en el Real Madrid. Pero como viene siendo habitual en el brasileño, lo hizo a través de las sus dos caras. De un lado, Dr.Jekyll, como salvador, una vez más, de su equipo con un gol que vale una clasificación. Del otro, Mr.Hyde, con una agresión a Orban, jugador del RB Leipzig, que el italiano Davide Massa solo consideró como amarilla. Como no podía ser de otro modo, ese color le pareció idóneo a Ancelotti.
“Los árbitros no tienen valentía para expulsarle”
“Le ha empujado un poco fuerte, pero no me parecía roja”, defendió Carletto. La opinión en Alemania dista bien de la del italiano. El más claro fue, como de costumbre, el diario ‘Bild’, que habló del “escándalo del estrangulador Vinicius”. Desde la cuenta del RB Leipzig se hizo una mención similar: “Le coge del cuello con ambas manos… Interesante”. La decisión de Massa para absolver a Vinicius fue determinante, porque pocos minutos después anotó el 1-0.
Orban, el jugador del equipo alemán empujado por el brasileño, criticó la decisión arbitral tras el encuentro. “Por desgracia, los árbitros no tienen la valentía de expulsar a este tipo de jugadores. Era roja directa clara. Vinicius me agarra con las dos manos. Es una falta de respeto”, explicó el capitán del RB Leipzig después del encuentro. Fue el autor del empate que sumió al Bernabéu en un mar de dudas.
“Voy a ser honesto. Si yo agarro por el cuello a un jugador del Real Madrid estaría expulsado al 100%”, denunció el también zaguero alemán Benjamin Henrichs. Desde el club blanco y el entorno del propio Vinicius se aseguraba tiempo atrás que sus problemas de comportamiento estaban localizados en LaLiga. Sin embargo, esta vez el problema se ha dado en la Champions, una reincidencia que preocupa en el vestuario madridista.
“El hecho de que marque el 1-0 es la guinda del pastel”
En un partido tenso, como el de Valencia, que supuso su vuelta a Mestalla después de los incidentes racistas del año pasado, Vinicius también estuvo cerca de no terminar el partido. En el 72 vio una amarilla por una falta sobre Hugo Guillamón. Cuatro minutos después anotó el gol del empate e hizo una celebración que le recriminó parte del Valencia.
También estuvo involucrado en la tángana final provocada por el fallo en el desenlace del colegiado Gil Manzano. Vinicius es un jugador superlativo que además ejerce de sostén y rescatador del equipo en partidos malos como el perpetrado frente al RB Leipzig. En el Real Madrid esperan que su versión positiva prevalezca sobre la que un día puede terminar en expulsión.
“Para mí solo hay una decisión posible en esta situación. Todo el estadio la vio. Con el VAR debería ser posible tomar esta decisión. El hecho de que este jugador marque el 1-0 pone la guinda al pastel“, lamentó Rouven Schröder, director deportivo de un RB Leipzig al que, sin embargo, acabó lastrando su propia falta de puntería y una inyección de ambición frente al dominador de la competición. Lo puso contra las cuerdas, pero no le asestó el golpe ganador. Una historia vista tantas veces en el Bernabéu, que coreó el nombre de ‘Vinicius’ como medida desesperada para invocar un gol que finalmente llegó en el minuto 65.