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El Gobierno ve con buenos ojos que una mujer suceda a Rubiales


El próximo domingo se cumplen dos meses de la recepción de Pedro Sánchez a las campeonas del mundo de fútbol en la Moncloa, encuentro en el que también estuvieron presentes el hasta entonces presidente de la Federación Española de Fútbol, Luis Rubiales, y el máximo dirigente del Consejo Superior de Deportes, Víctor Francos.

Después de aquella recepción el presidente del Gobierno en funciones dejó muy clara la hoja de ruta respecto a Luis Rubiales y el escándalo por su beso no consentido a Jenni Hermoso durante la entrega de medallas como campeonas del mundo en Sídney: “Las disculpas de Rubiales no son suficientes ni adecuadas. Debe dar más pasos”. Sánchez tomaba distancia así de un Rubiales con quien, hasta el escándalo, mantenía un trato correcto. 

Luis Rubiales y las campeonas del mundo. Reuters


El Gobierno entra en escena

El paso que pedía Sánchez lo dio Rubiales 19 días después, dimitiendo como presidente de la RFEF la noche del domingo 10 de septiembre. Sin embargo, el de Motril antes de ello cesó a todos sus vicepresidentes menos a uno, el extremeño Pedro Rocha, al que cedió el sillón presidencial. Hoy Rocha se mantiene como presidente de la Gestora, hasta que se convoquen las elecciones de la Federación, que el Gobierno quiere que se celebren lo antes posible dentro del primer semestre de 2024, año olímpico.

Desde que el pasado 20 de septiembre, momento en que Víctor Francos, presidente del CSD, se comprometió con las jugadoras en la reunión que mantuvieron hasta altas horas de la madrugada en Oliva, el Gobierno ha intermediado para que se fueran produciendo los “cambios” que las futbolistas demandaban. A la salida de Rubiales le han seguido las del seleccionador femenino Jorge Vilda, el secretario general de la RFEF, Andreu Camps, el del director del departamento de Integridad Miguel García Caba, el del director de comunicación Pablo García Cuervo… 

Y al tiempo que el CSD sigue trabajando para cumplir todo lo prometido a las jugadoras, se va conformando paralelamente el escenario de unas elecciones en las que hay mucho en juego. Mientras se cuestiona si Pedro Rocha presentará finalmente su candidatura, algo que no ha dejado claro el extremeño, se mantiene la incertidumbre entre los presidentes de las federaciones territoriales, donde además del extremeño se barajan otros dos nombres como ‘candidatables’: Salvador Gomar, de la valenciana, y Paco Díez, de la madrileña. Aunque ninguno de los tres ha movido pieza aún y no se espera que lo hagan antes de que se haga pública la fecha de las elecciones a la presidencia de la RFEF. 

Mateu Lahoz, en su último partido en LaLiga. EFE


García Silvero, Mateu Lahoz, Casillas…

Una partida de ajedrez con muchos intereses en el panorama futbolístico en que aparecen varios ‘lobbies’ de poder como el de los presidentes territoriales, el colectivo arbitral, Javier Tebas y una patronal que ha vivido en guerra con Rubiales, clubes como el Real Madrid o un Barcelona salpicado por el caso Negreira y su relación con el Comité arbitral de la Federación…

Entre los nombres que han comenzado a incluirse en las quinielas futbolísticas destacan los de Emilio García Silvero, responsable de Integridad en FIFA (Legal & Compliance) y hasta ahora ajeno a las elecciones a la RFEF, y el del exárbitro Antonio Mateu Lahoz, que podría encabezar una candidatura de consenso.

También se han barajado los nombres del exfutbolista Iker Casillas, que ya participó en la anterior elección y se terminó retirando, el ejecutivo Mateu Alemany, al que se le vincula con el Atlético de Madrid en los últimos días, y el exjugador Fernando Sanz. Ninguno ha dado un paso adelante anunciando su candidatura.

Mientras el Gobierno, que aboga por impulsar “una verdadera reestructuración del fútbol español”, no vería con malos ojos que también concurra alguna candidatura a la presidencia de la RFEF liderada por una mujer, pese a que desde que el ejecutivo se insiste en que no intervendrán en el proceso de elección. 

Irene Lozano, conocedora del entorno futbolístico

Hay nombres conocidos de mujeres que ya han ocupado puestos directivos en el ámbito del deporte con el Gobierno de Pedro Sánchez. Pero el que suena con más fuerza en los corrillos futbolísticos es el de Irene Lozano, la que fuera presidente del Consejo Superior de Deportes entre el 30 de enero de 2020 y el 31 de marzo de 2021.

Lozano tiene una experiencia sobradamente contrastada en el deporte y más en el fútbol, donde promovió con éxito los ‘Pactos de Viana’, acuerdos que firmaron Luis Rubiales, como presidente de la RFEF, y Javier Tebas, como presidente de LaLiga tras ocho horas de reunión en la sede del Ministerio de Asuntos Exteriores. Lozano logró el acuerdo y la foto con los dos después de una ardua negociación que trajo unos meses de paz en el fútbol y rescató al deporte olímpico y paralímpico.

Irene Lozano. EPE


Además, recientemente Lozano reveló en los micrófonos de la cadena SER que en su día se enfrentó a Rubiales y lo expulsó de su despacho después de que el de Motril descalificase a unos de sus asistentes. La que fuera presidenta del CSD, que actualmente es directora de la Casa Árabe, conoce perfectamente el entorno futbolístico al que se enfrentaría. De hecho, su nombre también aparece en las quinielas como posible Comisaria del Mundial 2030, que se celebrará en España, Portugal y Marruecos. 

Los perfiles de Ana Muñoz y Elvira Andrés

Otro de los nombres que aparece en esta lista oficiosa es el de Ana Muñoz, la que fuera directora de la Agencia Española de Protección de la Salud en el Deporte (anteriormente conocida como Agencia Antidopaje), directora general del CSD durante la etapa de Miguel Cardenal, y vicepresidenta de la RFEF y responsable del Departamento de Integridad durante el mandado de Luis Rubiales, hasta que dimitió después de año y medio por su oposición a las formas en que se gestionaba la Federación. El tercer nombre es el de Elvira Andrésabogada y experta en Derecho deportivo, y actual directora del Gabinete de Presidencia de la RFEF

Para que alguna candidatura salga adelante debe lograr el consenso de los presidentes territoriales, que tienen mucho peso en una asamblea con 140 votos. Desde el Gobierno se trabaja en lograr esa “renovación profunda” que Francos ha advertido que necesita la institución y su estructura. Justo lo que le pidieron las futbolistas de la selección femenina en Oliva, porque entre los 140 asambleístas que votarán al sustituto de Rubiales solo aparecen seis mujeres. 



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