El popular mago estadounidense David Copperfield ha sido acusado por 16 mujeres de abusos sexuales y “comportamiento inapropiado”, según ha desvelado la edición norteamericana del diario ‘The Guardian’. Los hechos denunciados ocurrieron entre la década de los 80 y 2014 e incluyen relaciones sexuales con menores de edad y con mujeres incapaces de dar su consentimiento por encontrarse bajo los efectos de las drogas. Copperfield, de 67 años, ha negado las acusaciones.
No es la primera vez que el ilusionista, cuyo nombre real es David Keith Kotkin, es acusado de abuso sexual. En 2018, Brittney Lewis denunció que dos décadas atrás, cuando era una joven modelo de 17 años, Copperfield la había drogado y había abusado de ella. Una de las mujeres citadas en el reportaje de ‘The Guardian’ asegura que tanto ella como una amiga tuvieron una una experiencia muy similar con el mago después de una de sus actuaciones. En la mitad de los casos de abuso que se relatan en el artículo, las víctimas eran menores de edad (algunas no tenían más de 15 años).
La importancia del #MeToo
Todas las mujeres que han accedido a aportar su testimonio conocieron a Copperfield a través de su trabajo como artista. La mayoría admiten que no se decidieron a dar el paso y hablar del asunto hasta que el movimiento #MeToo animó a las víctimas de violencia sexual a compartir sus experiencias.
Los abogados del mago declararon a ‘The Guardian’ que Copperfield “nunca se ha comportado de manera inapropiada con nadie y mucho menos con una menor de edad”, describieron al ilusionista como un defensor del movimiento #MeToo y subrayaron que en el pasado ya había sido objeto de “numerosas acusaciones falsas” como estas.