Se calcula que en España entre un 33 y un 43 por ciento de la población mayor de 18 años sufre hipertensión arterial. Un auténtico peligro para la salud con el que muchas veces se convive sin saberlo siquiera.
Y es que una de las características de esta patología es que no provoca síntomas, ni molestias, hasta que da la cara bien por una medición de la tensión rutinaria, bien cuando provoca graves consecuencias como enfermedades renales, cerebrales o cardiovasculares, como los infartos o los ictus.
Hablamos de un problema fácilmente prevenible con simplemente cambiar o introducir algunos hábitos de vida saludables como dejar de fumar, seguir una alimentación equilibrada y saludable, mantener un peso correcto, controlar el estrés, realizar ejercicio físico.
Y es respecto a este último punto al que se refiere un estudio realizado por sanitarios chinos, publicado recientemente en Jama Network, que revela cuál es el ejercicio físico más efectivo para prevenir la hipertensión: el Tai Chi.
Más efectivo que el ejercicio aeróbico
Cada vez hay más evidencia científica de que la realización de ejercicio físico es muy efectiva a la hora de reducir los niveles de tensión arterial, tanto la hipertensión (tener una presión sistólica entre 140-159 mm Hg y/o diastólica entre 90-99 mm Hg), como los de prehipertensión (sistólica de 120 a 139 mm Hg y/o una diastólica de 80 a 89 mm Hg).
Y uno de los ejercicios más prescritos para estos pacientes es el ejercicio aeróbico.
El problema es que este tipo de actividades tienen muchas limitaciones como el espacio donde realizarlo, la edad de algunos de los pacientes, el daño articular que se podría producir…
Por eso, los investigadores se plantearon analizar si el tradicional ejercicio chino podía proporcionar los mismos beneficios que el aeróbico.
- El Tai Chi es una forma de ejercitar tanto la mente como el cuerpo y que ha demostrado favorecer el equilibrio de las personas que los realizan, su función cardiovascular y respiratoria.
Una actividad más agradable en muchos casos para la persona y que, además, conlleva un menor impacto articular.
Así, analizaron a 342 pacientes de entre 18 y 65 años que sufrían prehipertensión arterial y que se dividieron en dos grupos para iniciar un entrenamiento de Tai Chi y de ejercicio aeróbico respectivamente.
El programa constaba de 4 sesiones por semana durante 12 meses y cada sesión estaba compuesta de 10 minutos de calentamiento, 40 de ejercicios y 10 de estiramientos.
El Tai Chi de estilo Yang consta de 24 movimientos estándar, mientras que en el ejercicio aeróbico los participantes realizaban actividades como subir escaleras, trotar, caminar a paso ligero y andar en bicicleta.
- Pues, bien, tras analizar los niveles de tensión de los participantes, los resultados mostraban como el Tai Chi reducía más eficazmente la presión arterial después de 12 semanas, 9 meses o 12 meses de intervención.
En concreto, el grupo de participantes con prehipertensión que realizaron los 24 movimientos de los que se compone el ejercicio típicamente chino, vieron reducida su presión arterial sistólica 2,40 mm Hg más que aquellos que practicaron las tablas de ejercicios aeróbicos.
Un ejercicio seguro y fácil de practicar
Ante estos datos, y aunque los ejercicios físicos aeróbicos también son válidos para prevenir la hipertensión, los investigadores consideran el Tai Chi como un ejercicio seguro y eficaz para reducir y prevenir la hipertensión arterial.
Y es que, como explican los investigadores:
- “El Tai Chi es apto para que lo practiquen personas de todas las edades y condiciones físicas”.
Además, es una actividad fácil de realizar e introducir en entornos comunitarios y que tiene otros muchos beneficios desde el punto de vista de la salud, como mejorar la flexibilidad corporal, el equilibrio y la función cardiopulmonar al tiempo que reduce el riesgo de caídas.
Los movimientos de Tai Chi pueden ser aprendidos y ejecutados fácilmente por personas de todas las edades y estados de salud, incluso a los de 90 años, en sillas de ruedas o que están postrados en la cama.