España ganó su cuarta Eurocopa en una final de taquicardia frente a Inglaterra. Los jugadores se marcharon con el trofeo, una medalla colgada del cuello y un premio extra: disputar la Finalissima.
Esta competición enfrenta al campeón de Europa contra el campeón de América. La pasada edición la disputaron Argentina ante italia con triunfo albiceleste en el estadio de Wembley.
La nueva edición se disputará probablemente en junio, aunque todavía no existe una sede determinada. Wembley podría volver a ser una opción, pero la UEFA y Conmebol deben pactar el sitio más idóneo.
Dos grandes cracks
Este partido tendrá un sabor especial para dos de los cracks del momento: Leo Messi y Lamine Yamal. Quizá sea la única vez que se enfrenten en sus carreras. Messi, con 37 años, y Lamine, con 17, son los líderes de sus respectivas selecciones y el duelo no puede ser más apasionante.
Lamine confesó en la concentración de España en la Selva Negra que “sería un sueño jugar contra Messi en la Finalissima”. Un sueño que podrá ser una realidad gracias a la conquista de la Eurocopa por parte de España y de la Copa América por parte de Argentina ante Colombia (1-0).
Cuando Lamine Yamal nació, Messi ya ganaba títulos con el FC Barcelona. Su infancia y adolescencia ha venido marcada por la admiración que siente hacia el argentino.
Por su parte, Messi quiere engrosar todavía más su palmarés con otro trofeo, con el prestigio que supone enfrentarse a España, una selección por la que pudo incluso jugar al tener la doble nacionalidad.
La fecha del partido es otro los caballos de batalla.Probablemente será en junio, aunque debe encajar con la celebración de la Final Four de la UEFA Nations League y con la disputa del nuevo Mundial de Clubs.
En todo caso, el éxito del encuentro está asegurado tanto por la expectación que levantará el encuentro como por las audiencias que pueda tener. Un España-Argentina es un enfrentamiento por todo lo alto y un auténtico caramelo para el paladar de los aficionados más acérrimos al fútbol.